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CincoSentidos

Hoteles y restaurantes acogen con inquietud la ley del tabaco

El Congreso aprueba la normativa, que entrará en vigor el 1 de enero

Desde principios del año que viene un gesto tan simple como hacer una reserva en un hotel tendrá una dinámica diferente. Si hasta ahora algunos hoteles ofrecían a sus huéspedes la posibilidad de reservar habitaciones libres de humo, a partir de enero a los clientes fumadores y a los no fumadores les sucederá lo que a la Alicia de Carroll al pasar a través del espejo: verán sus papeles cambiados. En lugar de reservar habitaciones para los no fumadores, las cadenas hoteleras tendrán la opción de guardar un 30% de sus estancias, como máximo, para los adictos al tabaco. De esta forma, serán ellos los que tendrán que preocuparse por reservar una habitación donde se les permita fumar. Porque el resto del hotel será un espacio libre de humos.

æpermil;sta es sólo una de las consecuencias prácticas que la nueva ley del tabaco, aprobada ayer en el Congreso, tendrá para la hostelería y la restauración. El texto, que entrará en vigor el próximo 1 de enero, dejó ayer definitivamente fuera de su articulado algunas de las reivindicaciones del sector, que considera que la normativa hace descansar un peso económico excesivo sobre sus hombros. 'Estamos francamente decepcionados con el texto. Nos parece muy bien que la ley tenga como objetivo proteger la salud, pero en su aprobación no se ha tenido en cuenta el perjuicio económico que supondrá para nosotros. Tendremos que hacer unas inversiones muy altas para cuidar la salud de terceros y creemos que esa no es una obligación que nos corresponda. No tendremos ni ayudas económicas ni un plazo amplio para hacerlo', señalaba ayer Ramón Estalella, secretario general de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cehat). Estalella hace referencia a una de las grandes batallas que el sector perdió ayer en la Cámara Baja: la pretensión de que el plazo para habilitar un compartimento separado para fumadores en locales de más de 100 metros -una de las obligaciones que exige la ley- fuese ampliado de 8 a 18 meses.

Bodas sin puros

'Las obras que tendrán que hacerse para separar la zona de fumadores del resto del local harán necesario solicitar licencias administrativas, algo que en edificios muy antiguos, por ejemplo, va a ser difícil que concedan los ayuntamientos. Además, muchos edificios de hoteles y locales de restaurantes no son propiedad de la cadena o la empresa que los gestiona, son inmuebles arrendados y habrá que contar con la autorización del arrendador para hacer esas reformas', explica Ignacio Sampere, socio del bufete A&S Sampere Asociados.

En caso de que alguna circunstancia impida a los establecimientos llevar a cabo esa separación entre fumadores y no fumadores, éstos tendrán que optar obligatoriamente por una política libre de humos en todo el local. 'Si por cualquier razón en esos locales no se puede crear una zona de fumadores, todo el establecimiento deberá estar reservado a los no fumadores y eso, lógicamente, va a limitar al sector', apunta Sampere.

Las ampollas que la ley aprobada ayer ha levantado en hoteles y restaurantes no terminan ahí. La prohibición de que los menores de 16 años accedan a locales donde se permita fumar -los bares y restaurantes de menos de 100 metros podrán optar entre permitir o prohibir fumar y tendrán que hacer constar esta condición en un cartel en el exterior- es visto por el sector como un duro revés. 'Esa prohibición nos parece una barbaridad, porque nos convertirá en policías y eso es muy desagradable', apunta el secretario general de Cehat.

Al igual que en otros sectores, la ley sancionará a los establecimientos que sean permisivos con la ley, además de al propio fumador. Un aspecto que los empresarios del sector deberán tener muy en cuenta, especialmente en el caso de eventos como bodas, bautizos o congresos. 'Tal y como está redactada la ley no se puede fumar en los espacios contratados para celebrar esos eventos. Esto lógicamente va a generar situaciones tensas. Es difícil imaginar una boda sin puros, por ejemplo. Sin embargo, el hotel debe dejar muy claro que hay una prohibición', advierte Ignacio Sampere.

¿Cómo blindarse frente a los incumplimientos y las sanciones que éstos puedan traer consigo? Según Sampere, la clave está en documentar la prohibición. 'Mi consejo es que cuando se alquile una sala o local figure esa prohibición en el contrato, para que no se traslade la responsabilidad del incumplimiento al hotel o restaurante', concluye.

Sanidad no financiará los tratamientos

Pese a que el PP y CiU lograron introducir en el Senado una enmienda para que el Sistema Nacional de Salud financiase los tratamientos (fundamentalmente medicamentos) a quienes quisiesen dejar el tabaco, el PSOE, ERC e IU-ICV votaron ayer en contra de esa propuesta. En ese sentido, la Asociación para el Autocuidado de la Salud (Anefp) reprochó ayer a la ministra de Sanidad, Elena Salgado, el no haber defendido la eficacia de la terapia sustitutiva del tabaco durante la tramitación de la ley. Anefp respondió a unas declaraciones de Salgado, quien el miércoles puso en duda la efectividad de estos productos, al recordar a la ministra que esos medicamentos están disponibles en las farmacias, han sido autorizados por el Ministerio de Sanidad y, por lo tanto, 'son seguros y eficaces'.

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