Ford recorta otro 7% la producción y planea vender su planta de Coventry
Los recortes de Ford vuelven a alcanzar a su filial Jaguar. El fabricante de automóviles planea reducir un 7% la producción de su marca de Jaguar y la venta de su planta de Coventry en Inglaterra.
Ford, eso sí, no tiene previsto eliminar más empleos en Jaguar tras los recortes del año pasado. Don Hume, portavoz de Jaguar, dijo a un rotativo neoyorquino que la marca 'tiene una base sólida de producción en el Reino Unido' y agregó que pese al descenso de ventas, la compañía se está 'posicionando para consolidar el negocio en un sector cada vez más competitivo'. Algo que parece contradecirse con los datos: sus ventas en el mercado estadounidense experimentaron un descenso del 30% en lo que va de año, como consecuencia de la mayor competencia de firmas como BMW o Lexus, según informó en su edición europea de ayer el diario estadounidense Wall Street Journal.
Con todo, los despidos no habrían sido el mal mayor, dado que el tercer fabricante mundial de coches tiene en mente una medida más drástica, al menos para la historia de una compañía tan apegada a las tradiciones: la venta definitiva de la planta de Browns Lane, en el centro de Inglaterra, lugar que fuera el hogar de su legendaria marca Jaguar desde 1928.
Un portavoz de la firma confirmó el interés de diferentes sociedades en adquirir la planta de Coventry, en la que trabajan unos 500 empleados, dedicados principalmente a la fabricación de acabados de madera para sus vehículos y a tareas administrativas. Jaguar emplea a 8.500 personas, casi todas en Reino Unido. En septiembre de 2004, Ford anunció su decisión de dejar de fabricar coches desde este mismo ejercicio en Browns Lane, su principal planta, en Coventry, y la de trasladar la producción a la de Castle Bromwich.
La medida supuso entonces el recorte de 1.150 empleos de los 6.700 que mantenía Jaguar en Reino Unido. Esta decisión, según los cálculos de la compañía, supondrá un ahorro anual de 106 millones de euros. Aquel día, Ford anunció además su retirada de los circuitos de Fórmula 1, en los que estaba presente precisamente a través de Jaguar.
Y es que la situación no es buena ni para la filial ni para Ford. Según el WSJ, la firma cerrará este año con fuertes pérdidas y planea rebajar su producción en 2006 hasta las 80.000 unidades, frente las 85.000 que se fabricarán este año. Esta cifra está lejos de los 200.000 coches previstos en la anterior estrategia. En noviembre, el presidente de la filial, Joe Greenwell, se vio obligado a reconocer que Jaguar no entrará en rentabilidad al menos hasta 2007.
En la década de los ochenta, Ford se hizo con varias marcas de lujo, como el fabricante de todoterrenos Land Rover o Aston Martin. A Jaguar le tocó en 1989. Esta filial va de camino de cosechar nuevas pérdidas este año, frente a los beneficios que, previsiblemente, generarán para la matriz Volvo y Land Rover. Ford, por su parte, cerró el tercer trimestre con unas pérdidas de 238 millones y va a despedir al 10% de su plantilla en EE UU.