Pulso entre el Gobierno y las eléctricas por el déficit de tarifa
La bomba del déficit de tarifa que el sector eléctrico ha venido acumulando a lo largo del año, y que podría alcanzar 3.600 millones, está a punto de estallar. En pleno proceso de elaboración de las tarifas para 2006, Industria plantea a las empresas un reconocimiento parcial de esa cantidad, además de un aplazamiento.
Cuánto y cuándo'. Así describen en una compañía eléctrica las líneas de la negociación que mantiene con el Ministerio de Industria para intentar recuperar el fuerte déficit de tarifa (desviación que se produce cuando los costes de generación son superiores al precio fijado en el decreto de tarifas) que el sector ha ido acumulando a lo largo del año. Según los cálculos de las empresas, hasta el mes de septiembre, el déficit rondó los 2.500 millones y para el conjunto del año se espera que alcance los 3.600 millones.
El reconocimiento de esta cantidad es clave para las compañías, pues la han venido anotando en sus cuentas trimestrales como un ingreso, por ser una cantidad que consideran pendiente de cobro. Para ello se amparan en un antecedente: el Real Decreto aprobado por el Gobierno del PP en 2003, por el que se les reconoció un déficit de tarifa de 1.300 millones acumulado en años precedentes. Sin embargo, en esta ocasión, el Ministerio de Industria, que a lo largo del año ha mantenido el más absoluto silencio sobre su intención de reconocer o no esta desviación ha planteado a las empresas la posibilidad de un cobro parcial del déficit y de un aplazamiento del mismo. En el ministerio aseguran que no existen 'negociaciones, lo que no significa que no se haya hablado del asunto con las empresas' en el marco de elaboración de las tarifas para el próximo año.
La cuestión principal en discusión es si las empresas deben o no cobrar la totalidad de un déficit tan desmesurado que han de costear los consumidores a través de la tarifa y que, en todo caso, debería ser laminada a lo largo de los próximos años, para evitar una subida del 20% en la tarifa. Ya se ha apuntando la posibilidad de que parte del déficit ocupe el hueco que dejará la moratoria nuclear en la tarifa el próximo año.
En cualquier caso, todo dependerá de la capacidad de la actual metodología de tarifas eléctricas (que fija un tope máximo del 2%), para poder romper ese techo. El secretario general de la Energía, Antonio Fernández Segura, señaló la semana pasada la decisión del Gobierno de posponer un cambio de esa fórmula hasta después de que se resuelva la opa de Gas Natural sobre Endesa. Y avanzó que la subida de tarifa de 2006 superará ese porcentaje (fuentes del sector auguran un 4%) pero respetando la actual fórmula, pues ésta permite recoger los costes derivadas de cambios legales.
Sin embargo, tanto si se incluye en la tarifa eléctrica o en una revisión de la misma a lo largo del año que viene (posibilidad que apuntan fuentes empresariales), el quid de la negociación está en la intención del Gobierno de no reconocer todo el déficit de tarifa a las empresas.
En este sentido, indican fuentes del sector, la desviación que se reconocería sería la que se ha producido estrictamente como consecuencia de la subida de los costes del combustible, que han disparado los precios del pool, por encima del 50%. Sin embargo, otras fuentes consideran que determinar esta cifra no es tarea fácil, además de que tampoco resolvería el problema. Según un experto, el verdadero problema del Gobierno 'es que éste no termina el 31 de diciembre, sino que continuará en 2006'. De hecho, en el mercado a plazo el precio de la electricidad en el pool se cotiza a 52 céntimos/MW, en línea cono los precios de este año.
Respecto al plazo, las empresas piden que, al menos, se produzca un reconocimiento oficial antes de finales de año, aunque el cobro se produzca con posterioridad. Esto les permitiría cerrar sus cuentas y evitar el derrumbe en los resultados que el déficit de tarifa les acarrearía, amén de conseguir (realizando provisiones) que puedan ser refrendadas por sus auditores. Todo ello sin olvidar el compromiso de reparto de dividendos de Endesa en plena, que asciende a 2.000 millones. Asumiendo el déficit que les corresponde, Iberdrola vio caer su beneficio neto hasta el tercer trimestre en un 52%; en el caso de Endesa, el descenso fue del 28%.
Sea como fuere, un portavoz de Industria recuerda que el ministerio va a esperar a que la Comisión Nacional de la Energía le remita los datos oficiales del déficit a cierre del año, lo que hace complicado que se pudiera reconocer antes de esa fecha.
Primer pulso entre Endesa e Iberdrola tras la opa
La pelea por el cobro del déficit de tarifa no se libra sólo entre el Gobierno y las eléctricas, sino también entre ella. Aunque las conversaciones (que Industria no quiere elevar a categoría de negociación) entre el ministerio y los máximos responsables de las compañías han sido a título individual, Endesa e Iberdrola (acreedoras de casi un 75% del déficit) mantienen posiciones enfrentadas.De hecho, ante la posibilidad de que no se cobre toda la desviación, cada una hace sus planteamientos. En una propuesta presentada por escrito, Endesa pide un cup para la generación hidráulica y nuclear para evitar los llamados beneficios llovidos del cielo. Por su parte, Iberdrola plantea que 'los derechos de emisión gratuitos no se cobren dos veces, sino una sola vez' y que se estudie si deben ser o no déficit', indica la compañía.Se trataría del primer pulso que libran Iberdrola y Endesa tras la opa de Gas Natural, al margen de la denuncia por asistencia financiera que la eléctrica opada ha presentado ante los tribunales contra el acuerdo para la venta de activos de Endesa, si triunfa la opa.En cualquier caso, en sus informes trimestrales, todas las empresas del sector han defendido su derecho a cobrar el déficit de tarifa. Para ello, apelan a la ley eléctrica cuyo artículo 16 establece 'que la generación se paga en base a precios marginales'. Por su parte, los críticos consideran urgente 'una reforma del mercado y del sistema de cobros de CTC, que generan estos déficit'.