España, un país muy poco competitivo
Si en términos empresariales se califica a los países como tigres, los que más despuntan, y tortugas, los más lentos en competitividad, España se encuentra dentro de este último grupo. Así lo pone de manifiesto el estudio sobre la competitividad laboral y la relación laboral en el siglo XXI, elaborado por el Instituto de Empresa y Adecco, que coloca a España en la décimo cuarta posición con respecto a Europa.
El informe coloca a Suecia y Finlandia en los primeros puestos y destaca que 'los ciudadanos de los países más competitivos están más satisfechos con su entorno y el nivel de bienestar'. También asegura que 'los trabajadores de entornos más competitivos son más autónomos, libres de organizar su trabajo y participan en la dinámica de la empresa'. Otros de los países mejor valorados en cuanto a competitividad son Irlanda, Dinamarca y Francia.
La productividad, señaló Gayle Allard, profesora del área de entorno económico del Instituto de Empresa, parece que es fuente de satisfacción y no de frustración, estrés e inseguridad. Además, el análisis concluye que en los países más competitivos el gasto social es más apreciado por los ciudadanos a juzgar por su mayor percepción de bienestar.
Otra de las ideas más valoradas es la autonomía e iniciativa por encima de valores más conservadores.