El Ejecutivo amplía a marzo el plazo para llegar a un pacto laboral
Vegara aboga por adecuar las cotizaciones a la pensión
El Gobierno sigue confiando en un acuerdo con los agentes económicos para reformar el mercado de trabajo. Pero es consciente de las dificultades y por ello, ha vuelto a alargar el margen de negociación hasta el primer trimestre de 2006, según dijo ayer el secretario de Estado de Economía David Vegara en el Foro Cinco Días. Es más, a juicio de Vegara, este plazo ni siquiera es para cerrar el acuerdo, sino 'para detectar si hay posibilidades o no de sellar un pacto'.
Este planteamiento del Gobierno pone de manifiesto el difícil momento que atraviesan las conversaciones sobre la reforma del mercado de trabajo, ante las evidentes discrepancias entre los planteamientos de patronos, sindicatos y Ejecutivo. Además, el clima de diálogo empeoró la pasada semana con la decisión del Gobierno de aprobar la devolución del patrimonio histórico sindical a UGT, lo que ha provocado un profundo malestar en el seno de Comisiones Obreras, contaminando de alguna manera el debate.
Vegara recordó que el Gobierno tendrá que 'tomar medidas' y legislar en caso de que los agentes sociales no lleguen a un acuerdo. Y aunque habló del primer trimestre de 2006 como fecha tope, los negociadores estiman que este plazo podría no agotarse si las partes constatan antes que no hay posibilidades de acuerdo.
Vegara indicó que la propuesta del Gobierno en la mesa de negociación pretende 'dar a las empresas la flexibilidad que necesitan y reducir la temporalidad'. Aunque no precisó ninguna medida, defendió el documento de propuestas de su departamento y de Trabajo al considerar es un texto 'razonable y equilibrado', algo que no comparten ni empresarios ni sindicatos.
La clave de este documento del Gobierno es la creación de un nuevo contrato para actividades subcontratadas, formalmente indefinido, pero que durante los tres primeros años tendría una indemnización por despido de entre 10 y 20 días y el procedimiento de extinción del contrato sería prácticamente automático. Los sindicatos rechazan de plano este contrato que también defiende CEOE.
La siguiente reforma
El responsable de Economía también se refirió a la reforma de las pensiones, que el Gobierno empezó a negociar ayer con patronal y sindicatos. Según Vegara, el eje de los futuros cambios será combinar el retraso de la edad de jubilación y la adecuación de la cotización que se exige y la pensión que se genera. Pero el documento de propuestas del Gobierno hace más hincapié en la prolongación voluntaria de la vida activa que en los cambios en la carrera de cotización. La reforma es necesaria porque el gasto en pensiones 'puede duplicarse en los próximos 30 o 40 años, pasando del 8% del PIB a ocho puntos más'.