Estados Unidos quiere el mercado de profesionales
El comisionado del circuito profesional estadounidense (PGA Tour) lanza un espectacular plan de crecimiento con vistas al año 2007 que tendrá un apoteósico final de temporada con la disputa de cuatro torneos que repartirán, cada uno de ellos, 10 millones de dólares en premios.
Finchem es el dueño del negocio. No controla los cuatro grandes (Masters, US Open, British y US PGA), pero gobierna el circuito más poderoso del mundo, cuyo calendario de competiciones se extiende desde el mes de enero hasta finales de noviembre, con la participación de los mejores golfistas del planeta. A partir de ahora aquellos jugadores que se han resistido a abandonar el circuito europeo no les quedará otra salida que intentar jugar en Estados Unidos donde se decidirá todo: el ranking mundial y la mayor lista de ganancias del mundo. Los planes de crecimiento del PGA Tour afectan negativamente a Europa que vivirá una migración de talentos atraídos por las mejoras de juego que les ofrecen.
El comisionado se ha manifestado con claridad, justo cuando comienzan las negociaciones con las distintas cadenas de televisión para renovar los derechos a partir de 2007. 'La parte final de nuestro circuito no tenía suficientes elementos para interesar al gran público. Después del US PGA en agosto, el golf iniciaba un largo otoño afectado por la competencia del béisbol o el fútbol americano universitario. Así que me reuní con el equipo de gestión de nuestro circuito para iniciar un proceso de evaluación de dónde estamos y dónde deseamos estar en los años venideros', explica Finchem desde su despacho en el cuartel general del PGA Tour en Ponte Vedra Beach (Florida).
Así se ha decidido crear tres torneos, posteriores al US PGA, que repartirán 10 millones de dólares en premios, a los que accederán los mejores del circuito americano. 'Los treinta mejores de la lista de ganancias disputarán el The Tour Championship patrocinado por Coca Cola, el evento que cierra la temporada, pero con estos premios, además de asegurarnos la participación de los mejores, mantendremos la emoción de ver cuál es el jugador líder de ganancias'.
Una clasificación que éste año ha liderado Tiger Woods con 10,6 millones de dólares en premios que, sin embargo, no le han servido para superar los 10,9 que Singh consiguió el año pasado.
Los tres torneos que aceptarían el reto de entrar en estas auténticas series mundiales, que patrocinará la poderosa firma de paquetería FedEx con la puesta en marcha de la denominada FedEx Cup, serían el Barclays Classic de Nueva York, el Deutsche Bank de Boston y el Western Open de Chicago que podría ser sponsorizado por Chrysler. Dos entidades financieras y un gigante de la automoción prestarían su apoyo a tres eventos de la máxima categoría en otras tantas ciudades reconocidas entre las más vitales de Estados Unidos. La final, el The Tour Championship, seguirá en Atlanta.