Ubaldo Nieto reconoce irregularidades en las privatizaciones del PP
El fiscal no ha apreciado supuestos de responsabilidad contable, pero algunos procesos de privatizaciones de empresas públicas acometidos entre 1996 y 2002, etapas que corresponden a gobiernos del PP, registraron 'actuaciones no acordes con los procedimientos establecidos', según reconoció ayer en el Congreso el presidente del Tribunal de Cuentas, Ubaldo Nieto.
En las ventas de empresas que se efectuaron mediante concursos restringidos, 'la concurrencia se ha limitado a contactos con determinadas empresas consideradas como posibles compradores', señala el informe de fiscalización debatido ayer en la Cámara Baja. Nieto citó dos casos en los que se pudo vulnerar el principio de concurrencia: las privatizaciones de Aldeasa y Tabacalera.
En el primer caso, señaló, porque Tabacalera compró directamente a AENA un 20% de Aldeasa, y en el segundo porque se mantuvo la autorización administrativa previa (acción de oro), a pesar de que habían desaparecido las circunstancias que fundamentaban su aplicación a la tabaquera.
El informe del Tribunal explica que, en todas las ventas, se contó con una evaluación externa, pero puntualiza que, 'con frecuencia, el responsable de la misma fue el asesor de la operación de privatización, lo que pudo influir en la objetividad de la valoración'.
La fiscalización subraya también que, en algunas ocasiones, el tiempo transcurrido entre la evaluación y la venta fue tan amplio que el valor de las empresas cambió. Además, en ocho casos el precio fijado en el contrato de compraventa fue objeto de posteriores 'ajustes a la baja'.
El Tribunal de Cuentas señala también que la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) no efectuó en todos los casos un seguimiento del cumplimiento de los compromisos adquiridos por los compradores.
El PSOE pide explicaciones a Josep Piqué
El portavoz del Grupo Socialista en la comisión del Tribunal de Cuentas y diputado del PSC, Francesc Vallès, pidió explicaciones al ex ministro de Industria, Josep Piqué, por las irregularidades detectadas por el Tribunal de Cuentas.El diputado también censuró 'la actitud demagógica e irresponsable de destacados miembros del PP', que han cuestionado la credibilidad de un informe 'riguroso, objetivo y de gran calidad técnica'.