Competencia investiga si pactan precios los panaderos valencianos
Una barra de pan de cuarto cuesta 0,65 euros en una céntrica panadería de Valencia. En un establecimiento similar, pero en un barrio alejado del bullicio comercial de la capital esa misma barra de pan cuesta... 0,65 euros. Y en el otro extremo de la ciudad. Esta igualdad en los precios llevó a un ciudadano a presentar ante el Tribunal de Defensa de la Competencia una denuncia por un posible pacto para fijar los precios por parte del sector de panaderos de Valencia y que, tras unas investigaciones, el organismo investiga de oficio.
La denuncia de este ciudadano anónimo llegó al Tribunal de la Competencia, el cual pidió la ayuda de la Dirección General de Comercio de la Generalitat Valenciana para realizar una investigación previa a la admisión a trámite, dado que las competencias sobre comercio están transferidas. Según el secretario general del Gremio de Panaderos y Pasteleros de Valencia, Vicente Martínez, los inspectores empezaron entonces a solicitar actas de las juntas directivas y de las asambleas, y entrevistaron 'a un buen número de panaderos tanto asociados al gremio como no'. De hecho, aunque la Generalitat prefiere no comentar el asunto y sólo se limita a reconocer que realizó esta investigación, otras fuentes apuntan que se ha investigado también en la Federación Provincial de Panaderos de Valencia y en una asociación que agrupa a las panaderías de masa congelada.
El objetivo estaba claro: obtener pruebas de ese posible pacto de precios en el sector, algo que evidentemente no aparece en las actas, como explica Martínez. 'Pero no es que no se plasme en papel, es que no existe ningún tipo de acuerdo para que los precios sean los mismos', explica el directivo del gremio, que recuerda que desde hace mucho tiempo existe libertad total, 'no como antes, que el precio, el peso y el tamaño de las barras de pan estaban marcadas por ley'.
Entonces, ¿por qué coinciden los precios en la mayoría de las panaderías? 'En un sector donde las empresas tienen una estructura tan parecida, en el que todos usamos la misma materia prima, fundamentalmente la harina, con un precio que es para todos prácticamente igual, lo normal es que el precio sea muy parecido al final del proceso. Como mucho se pueden ir céntimos', dice Martínez.
Con todo, el hecho de que el Tribunal de Defensa de la Competencia haya asumido la denuncia y haya abierto la investigación tras recibir los informes apunta a que algo debe haber que no le cuadra al organismo encargado, entre otras cosas, de evitar que se pacten los precios de las cosas. Desde la Dirección General de Comercio no quieren divulgar el contenido de los informes enviados, amparándose en que sólo las partes implicadas tienen acceso a ellos. El gremio cree que no resultará afectado por la investigación, pero la última palabra está en manos de los jueces.
Mientras, el precio del pan en Valencia sigue siendo el mismo en la mayor parte de panaderías, los antes mencionados 0,65 euros por barra de cuarto. Y curiosamente, el día que sube, suele hacerlo de forma casi automática en la mayoría de hornos.