Ferrovial estudia comprar una concesión de metro a Alstom
La concesionaria del metro de Londres Tube Lines, controlada en un 66% por Amey (filial británica de Ferrovial al 100%), se plantea comprar total o parcialmente el contrato de mantenimiento que tiene Alstom en una de las líneas que Tube Lines tiene a cargo, Northern Line.
Es una de las posibilidades que ahora tiene sobre la mesa Tube Lines (controlada por Amey y la estadounidense Bechtel). Los problemas generados en la línea, cuyo mantenimiento es responsabilidad de Alstom, han generado la actual situación. El sistema automático de frenado de seguridad de los trenes ha sufrido cinco fallos últimamente. Toda la flota ha sido revisada. El problema derivó en el cierre de la línea dos días la semana pasada tras la negativa de los sindicatos a continuar con el servicio. London Underground, la empresa municipal encargada del metro, ha considerado que no hay riesgo para la seguridad.
Contrato por 600 millones
Otra de las soluciones sería cancelar el contrato con Alstom. El ayuntamiento está a favor de simplificar los contratos de mantenimiento en favor de Tube Lines, lo que supone acabar la relación contractual con el fabricante ferroviario francés.
Cuando la empresa municipal London Underground adjudicó la línea a Tube Lines Alstom ya tenía el contrato. La participada por la filial de Ferrovial logró en paralelo otros dos contratos para mantener y mejorar las líneas Jubilee y Piccadilly íntegramente.
Ahora el conflicto en la Northern ha sido visto por algunas de las partes como una oportunidad de que Alstom deje de prestar el servicio de una manera u otra.
El acuerdo puede llegar en unas semanas, según ha declarado Terry Morgan, primer ejecutivo de Tube Lines a Bloomberg. El contrato de mantenimiento de Northern Line desde 1995 a 2015 ronda los 600 millones de euros, cifra que servirá de base para negociar un acuerdo. 'Se trata de un acuerdo complejo porque es una iniciativa de financiación privada de calibre', dijo Morgan.