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CincoSentidos

La escasez de amarres frena las ventas de barcos

La industria exige nuevos puertos para embarcaciones de recreo y recortes fiscales para hacer más asequible la navegación

Ver la etiqueta del precio puede enfriar los ánimos del aficionado más entusiasta a la hora de comprar un barco, pero no es lo único que invita a pensárselo dos veces. España cuenta con costas y clima como para ser una potencia mundial en demanda, pero sólo uno de cada 256 españoles es propietario de una embarcación de recreo o deportiva, frente a las cuotas que presentan Suecia (un barco por cada 43 habitantes), Dinamarca (uno por cada 14 personas), Francia (uno por 43 habitantes) e Italia (una nave por cada 68 italianos).

La Asociación de Industrias Náuticas (ADIN) culpa a la escasez de amarres (106.795 en 321 puertos) y a la falta de una legislación y fiscalidad más favorables. El cóctel hace que el crecimiento del negocio sea un hecho en 2004, pero sólo en un 5,4% respecto al año anterior.

Profundizando en los problemas que afectan al dueño de un barco, el presidente de la Fundación Innovamar, José Manuel Manzanedo, opina que en España se pagan impuestos, como el de matriculación, que no existen en el resto de Europa. Además, 'la falta de amarres encarece la oferta y las titulaciones son mucho más exigentes, lo que motiva que se opte por contratar tripulaciones extranjeras', dice Manzanedo.

Innovamar, centrada en el avance tecnológico del sector, llama la atención sobre la corriente de comprar fuera de España y registrar bajo banderas de otros países para ahorrar dinero y problemas.

Cita sectorial

La radiografía del negocio, en un informe elaborado por Fira de Barcelona y ADIN, fue mostrada ayer en Madrid durante la presentación del Salón Náutico Internacional de Barcelona, que se celebrará a partir del 22 de octubre en la Ciudad Condal.

Los responsables del evento destacan como tendencias una mayor demanda de barcos de tamaño medio (entre 10 y 13 metros de eslora) e importantes novedades en electrónica y equipamiento.

En este país existen 183 empresas dedicadas a la producción. Sus ventas sumaron 569,9 millones en 2004 y de sus dependencias salieron 12.909 unidades (6.537 neumáticas y 6.372 a motor o vela). En cuanto al consumo, los aficionados españoles hicieron pedidos por 950,6 millones y las matriculaciones ascendieron hasta las 12.825 unidades. Un dato esperanzador para la industria es el incesante interés por los modelos de pequeña eslora, lo que responde a un incremento de nuevos enamorados del mar.

'Es necesario activar la demanda para justificar un aumento del número de amarres', expuso el Secretario General de Industria, Turismo y Comercio, Joan Trullén, quien destacó que hay varios puertos en construcción localizados en el Mediterráneo (Cataluña, Baleares y Comunidad Valenciana).

En relación con el gusto por la navegación, los deportes náuticos cuentan en España con 220.525 licencias. Según informan las propias federaciones, 92.689 corresponden a pescadores, 45.272 a practicantes de vela y 44.062 a submarinistas, como disciplinas de mayor tirón. Todos ellos tienen la oportunidad de soñar con su navío particular en el cercano Salón de Barcelona.

Claves de negocio

El de los astilleros es el subsector más representativo de la industria náutica. Sus expectativas para 2005 son positivas: un 44,3% de los empresarios creen que elevarán sus ventas, frente a un 37,4% que mantendrán los volúmenes de 2004. Una claves para el beneficio está en la evolución del precio del petróleo y las materias primas.La patronal ADIN denuncia la falta de mano de obra especializada. Otra dificultad se encuentra en la apertura de los mercados europeos.El sector reclama modificaciones fiscales y nuevas fórmulas de financiación que atraigan clientes.El Gobierno compromete su ayuda a través del impulso de la I+D+i. El reto es equiparar la evolución naval a la aeronáutica.La zona del Caribe promete ser una válvula de escape para los exportadores. Desde allí se entra en mercados emergentes como México.

El tercer salón de Europa

100.000 metros cuadrados de exposición, 600 empresas expositoras de 32 países y un centenar de actos paralelos convierten al Salón Náutico de Barcelona en el tercero más importante de Europa, tras los que se celebran en Génova y Düsseldorf.La zona de exposición se mantendrá abierta entre el 22 y el 30 de octubre en el recinto Gran Vía de Fira de Barcelona. Y del 26 de este mes al 2 de noviembre tendrá lugar la muestra flotante del propio Salón Náutico en Port Vell (Barcelona), donde permanecerán atracados 250 barcos de gran eslora en los muelles Fusta y Espanya.Fira de Barcelona espera superar el récord de 175.000 visitantes logrado en 2004 y mantener la cifra de negocio. Según la organización, en este salón se inician el 70% de las ventas del sector en España.El director del evento, Jordi Montserrat, destaca la presentación de unas 30 regatas aprovechando la reunión en la capital catalana, y la celebración de un encuentro de negocios entre empresas europeas y suramericanas.

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