La familia Llorens Torne controla un 1% de FCC de forma indirecta
La familia catalana Llorens Torne ha aportado 40 millones de euros al grupo creado por Ibersuizas para invertir en B-1998, la sociedad de Esther Koplowitz que controla la constructora FCC.
La familia Llorens Torne, una de las más representativas de la burguesía barcelonesa, a través de su empresa Catalana de Obras y Servicios, se dio a conocer como grupo inversor en Ibersuizas el año pasado, cuando, mediante una ampliación de capital, se hizo con algo más del 8,87% del accionariado de la empresa controlada por el Banco Pastor. El grupo invirtió 17 millones a esta operación.
Ahora, el grupo catalán, especializado en movimientos de tierra, ha destinado 40 millones a Ibersuizas Holdings, lo que la convierte en titular indirecto del 2,13% del capital de B-1998, sociedad en la que Esther Koplowitz tiene depositado el 52,5% del capital de FCC.
La participación en Ibersuizas Holding, una instrumental creada para facilitar la inversión en B-1998, da a Catalana de Obras y Servicios un porcentaje indirecto del 1% en el capital de FCC.
El grupo aglutinado por Ibersuizas ha invertido 281 millones en participaciones de la sociedad B-1998
Parte de esta entrada se ha realizado a través de un préstamo de 15 millones de euros que Catalana de Obras y Servicios había otorgado a Ibersuizas y que se amortizó con participaciones de Ibersuizas Holding, titular a cierre del pasado ejercicio de participaciones en B-1998 por valor de 55,4 millones de euros. Este año, Catalana de Obras y Servicios ha concedido a Inversiones Ibersuizas otro crédito de cinco millones de euros, condicionado a la compra de participaciones de B 1998, que se devolverá en el plazo máximo de seis años a través de participaciones de Ibersuizas Holdings.
Hasta la fecha, el grupo inversor aglutinado por Ibersuizas ha destinado 281 millones a la compra de participaciones de la sociedad B-1998, cuyo único activo es la participación del 52,5% de FCC. De este volumen de inversión, a Cartera Deva corresponden 110 millones, a Inversiones Ibersuizas, 81 millones, otros 39 millones han sido desembolsados por el grupo canario Inversiones San Felipe y 12 millones por EBN, a los que habría que añadir 40 millones de Catalana de Obras y servicios.
Acompañando a estos inversores, pero con contratos independientes, estarían el grupo bodeguero Faustino, y la familia Peugeot, que han metido más de 200 millones en B-1998. En conjunto, los socios de Esther Koplowitz, controlan el 26,76% de B-1998, que les da el control de alrededor del 14% de FCC.
Enfrente de este grupo, que actúa de forma concertada a través de un pacto parasocial, estaría Acciona, que con un 15,05% del capital de FCC se ha mostrado dispuesto a tener algo que decir en el capital de la constructora, aunque con escaso éxito por el momento. Pero la inversión ha sido muy jugosa para los accionistas. Acciona cifra en 50 millones de euros los dividendos recibidos desde que entró en el capital de la constructora.
Ibersuizas, por su parte, sólo el año pasado recibió cuatro millones como remuneración por su participación en la empresa. Y las plusvalías son muy sustanciosas por la buena evolución de la acción.
Fuentes de FCC señalaron que no está previsto, de momento, que haya nuevas incorporaciones al accionariado de B-1998.