Iberdrola hace caja tras vender el 8% de Portland a FCC
Iberdrola empieza a hacer caja con vistas a la eventual compra de activos a Endesa si triunfa la opa de Gas Natural. Ayer salió del capital de la cementera Portland Valderrivas, tras vender el 8,06% a su matriz, FCC, por 150,3 millones. Casi la mitad, más de 70 millones, son plusvalías.
El acuerdo que ayer cerraron Iberdrola y FCC supone la salida de un accionista histórico de la cementera Portland Valderrivas. La segunda eléctrica llevaba en la empresa desde mediados del siglo pasado con una fuerte posición en el consejo, no en vano era hasta ayer el segundo accionista, y como tal tenía voz y voto en la comisión ejecutiva.
FCC, que tiene planes para potenciar la filial cementera, ha decidido reforzar aún más su papel de control. Para ello ha pagado a Iberdrola 150,3 millones de euros, 67 euros por acción. Esto significa que ha abonado casi 13 millones menos que el precio de mercado de Portland Valderrivas tras lograr un descuento del 8%. Financiará la compra con cargo a deuda.
Con el paquete adicional del 8,06%, FCC pasa de controlar el 58,76% al 66,82%. Si bien, ha decidido apuntar esta última participación no al holding sino a su filial al 100% Asesoría Financiera y de Gestión (Afigesa), informó a la CNMV. Con la operación, la constructora da un paso más en su apuesta por la cementera, con la expectativa de una mejor evolución de la filial de Portland Valderrivas en EE UU, Giant Cement. Y sin descartar más compras para ganar tamaño.
Mientras, Iberdrola se apunta 150 millones, de los que más de 70 millones son plusvalías (antes de impuestos) que guardará previsiblemente para comprar activos excedentes tras la unión de Endesa y Gas Natural si es que la oferta pública de adquisición lanzada por esta última empresa llega a buen puerto. El montante ingresado con la venta es una pequeña ayuda dentro de la inversión que prevé Iberdrola para este fin, en torno a 8.000 millones.
Un consejero menos
El consejero representante de la eléctrica en Portland Valderrivas, Julián Martínez-Simancas, presentó ayer mismo la dimisión de su puesto en el consejo y en la comisión ejecutiva. La próxima reunión del órgano de gobierno de la cementera decidirá si el puesto se amortiza o si se cubre con otro representante de FCC, una alternativa con bastantes posibilidades.
Ya el pasado día 23 hubo cambios en el consejo por jubilaciones. Cesó José Ignacio Taberna como secretario del consejo, que fue sustituido por José Luis Gómez Cruz pero como secretario no consejero. También dejó su sillón Fernando Ferreras Fernández, director general de administración y finanzas.
El consejo, que queda ahora formado por 15 vocales, aprobó también varios cambios en el reglamento de este órgano por los que agiliza el sistema de mayorías para nombrar consejero delegado de entre sus miembros, además de ampliar la opción de designar otros consejeros externos que no sean dominicales (representantes de participaciones de control) ni independientes. Entre estos últimos, ya figura en el consejo Jaime de Marichalar, duque de Lugo.
Koplowitz gana peso en la filial
La primera accionista de FCC, Esther Koplowitz, vuelve a reforzarse este año en la filial de cementos. Controla el 58,8% a través de FCC, el 8,06% mediante Afigesa y otro 0,063% indirectamente a través de Compañía Auxiliar de Agencia y Mediación. En abril pasado asumió el cargo de vicepresidenta en Portland Valderrivas, un signo más de que la cementera es la joya de FCC a la que el grupo va a mimar aún más. Y ello a pesar de que los resultados en el primer semestre han sido poco halagüeños.