ABN ha confirmado en un comunicado que después de finalizar esta operación, que implica el pago de 26,50 euros por cada acción de Antonveneta, ostenta ya el 69,28% del banco italiano, y recuerda que ha lanzado una oferta sobre los títulos restantes por el mismo precio.
El intento de compra de Antonveneta por parte de ABN le supuso a la entidad holandesa enfrentarse a una dura oposición de diversos sectores empresariales italianos. Llegó además a herir de muerte la reputación del gobernador del Banco de Italia, Antonio Fazio, a quien la prensa sorprendió, mediante grabaciones secretas, dando su apoyo explícito a las maniobras de Popolare Italiana.
Ese apoyo ha causado a su vez un terremoto político en Italia, y desencadenó la pasada semana en la dimisión del ministro italiano de Economía, Siniscalco, ante sus discrepancias con Silvio Berlusconi sobre las medidas a adoptar para forzar a Fazio a abandonar su cargo, que en Italia es vitalicio tras la designación, y que no contempla procedimientos para su remoción.