Microsoft se apunta a las reglas de buen gobierno y da mayor voz a los accionistas
Microsoft, el mayor fabricante de software del mundo, ha querido sumarse a las nuevas prácticas de buen gobierno corporativo. La multinacional ha decidido revisar sus normas internas para hacer más fácil que los accionistas de la compañía puedan forzar la marcha de consejeros fuera del consejo de administración.
A partir de ahora, cualquier consejero que reciba una mayoría de votos en contra por parte de los accionistas deberá poner su cargo a disposición del consejo. El Comité de Gobierno y Nombramientos será el que considere dicha dimisión y hará una recomendación al consejo, según ha explicado la multinacional con base en Readmond en un comunicado oficial.
La compañía hizo público estos cambios el pasado viernes, al tiempo que anunciaba un dividendo de 8 centavos por acción, que serán abonados el próximo 8 de diciembre.
Este giro de gobierno corporativo emprendido por Microsoft es el mismo que puso en marcha recientemente Walt Disney, la segunda compañía de medios de comunicación más grande de Estados Unidos, después de que una rebelión de inversores provocara que el 45% de los accionistas con capacidad de voto retirara su apoyo al presidente de la compañía de entretenimiento, Michael Eisner.
'La decisión de hoy por el pasado viernes da a los accionistas más voz en los procesos de selección de directivos', aseguró Bill Gates, presidente del consejero de administración de Microsoft, quien advirtió que 'el consejo está obligado a estar al tanto de las mejores prácticas de buen gobierno y a adoptar aquellas que sirvan al interés de nuestros accionistas a largo plazo '.
La medida emprendida por el gigante del software va en línea con la transparencia que se está exigiendo a las empresas desde el pasado año, tras algunos escándalos financieros como el que impulsó a los inversores de Disney a llevar a la compañía a los tribunales por un contrato a un amigo del entonces presidente de la firma Michael Eisner. Microsoft da pues desde ahora mayor control de la gestión a los accionistas.