Caldera anuncia una subida de las pensiones mínimas de entre el 6,5% y el 8% en 2006
El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, ha anunciado hoy que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2006 incluirán una subida de las pensiones mínimas de entre el 6,5% y el 8%, dependiendo de que los beneficiarios tengan o no cónyuge a cargo. Caldera también ha adelantado que septiembre será "un buen mes" para el empleo y la Seguridad Social y que espera que el paro cierre el año por debajo del 9,3%.
Tras reunirse con miembros de los distintos grupos parlamentarios para estudiar las partidas recogidas en los PGE para temas sociales, Caldera adelantó además que el Gobierno hará también el "esfuerzo" de subir un punto adicional las pensiones no contributivas.
El ministro ha subrayado que la subida de las pensiones mínimas será muy superior a la inflación, al tiempo que recalcó que esta medida cuenta con "el pleno acuerdo" de los grupos parlamentarios.
Paro por debajo del 9,3%
El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, adelantó hoy que septiembre será "un buen mes" para el empleo y la Seguridad Social, ya que, según sus previsiones, el mes acabará con alrededor de un millón más de afiliados al sistema que en la misma fecha del pasado año. El total de afiliados se situó en 17.143.750 personas al finalizar septiembre de 2004. Caldera indicó además que la tasa de paro a finales de año será cercana a la actual del 9,3% "o un poquito mejor".
En ese sentido, ha destacado la capacidad de la economía española para traducir su propia tasa de crecimiento en tasa de aumento de empleo y subrayó el papel de los empleadores en esta materia, con su "combate a la economía sumergida" durante el proceso de regularización de inmigrantes.
A ese respecto, ha asegurado no haber dudado nunca del éxito del proceso de regularización, gracias a su confianza en la honradez de los empresarios españoles. Caldera destacó que más de un millón de personas pasaron por oficinas de la Administración para regularizar trabajadores.
En su intervención en la reunión anual de miembros europeos de la Organización Internacional de Empleadores (OIE), que tuvo lugar en la sede de la CEOE, Caldera manifestó, "a título personal", su creencia en que Europa, ante su baja tasa de natalidad, seguirá el modelo de España sobre regulación de inmigrantes.
Asimismo, defendió una mayor concertación de las políticas sobre inmigración entre los países de la UE, al tiempo que explicó que no tiene sentido pensar que el proceso abierto en España pudiera impulsar inmigración ilegal en otros países de la Unión. Caldera recalcó que la legislación española obliga a trabajar cinco años dentro del sistema antes de disfrutar de la libre circulación, por lo que es absurdo suponer que un trabajador legal en España decida trasladarse tras ese periodo a otro estado para caer en la ilegalidad.
Menos temporalidad
El ministro señaló a la temporalidad como uno de principales problemas a los que debe enfrentarse el proceso de diálogo social, ya que, según explicó, no beneficia a trabajadores ni a empleadores, dado que implica menor formación, perjudica a la productividad y aumenta la posibilidad de accidentes laborales.
Por ello, ha pedido "un esfuerzo" a los interlocutores sociales para que sus actuales conversaciones sirvan para aumentar la estabilidad en el empleo. Por último, Caldera hizo hincapié en la escasa conflictividad laboral existente en España, cuya tasa, según indicó es apenas "testimonial".