Antonio Miró abandona el lado oscuro
Antonio Miró ya no vive en la sombra. El modisto catalán mostró ante las gradas de la Pasarela Gaudí de Barcelona su cara más colorista. Influido por la obra del polifacético artista británico David Hockney, creador de la serie pictórica Piscinas de los Ángeles, Miró plasma la luz, el colorido y la calidez de las obras de este fotógrafo y pintor inglés en su colección para el próximo verano. Turquesas, verdes y amarillos muestran un Miró que se desmarca de su paleta de colores tradicionales. Los estampados de lunares y palmeras dan un toque de excentricidad a sus nuevos diseños.
El modisto catalán fue ayer el encargado de dar el pistoletazo de salida de la pasarela, el plato fuerte de la Barcelona Fashion Week, que terminará el próximo viernes 23 una vez tome el relevo Circuit, un espacio dedicado a los creadores emergentes. Durante toda la semana unos 40 diseñadores presentarán sus propuestas en la Pasarela, que cuenta con un presupuesto de siete millones de euros. La prenda fetiche de Miró sigue siendo en la primavera y verano de 2006 la americana, ya sea de lino o algodón. Los pantalones los prefiere anchos, apostando por la comodidad y la frescura. Con faldas de vuelo y vestidos camiseros, articula su visión de la mujer. En esta colección, Miró juega con los complementos. Sus predilectos son las gafas y sombreros amplios que evocan las playas californianas.
La catalana Totón Comella, alma máter de la firma de ropa interior TCN, hizo de la cantante Paulina Rubio la mejor percha de sus diseños. Comella presentó unos biquinis mínimos con pequeños volantes. Sus colores predilectos son los pálidos, amarillos, rosas y celestes.
A lo largo de la semana, la lista de primeras figuras del diseño español se completará con Amaya Arzuaga, que presentará por primera vez en Gaudí su colección de hombre, Armand Basi o Hannibal Laguna.
Los compradores nacionales impulsan la SIMM
La Semana Internacional de la Moda de Madrid (SIMM) clausuró su 54 edición el pasado 5 de septiembre con un nuevo récord de visitantes, al recibir a 26.566 profesionales, un 3,6% más que en la pasada edición. Este crecimiento se debe al mayor número de compradores nacionales que han ido a la feria, ya que el peso de los extranjeros rondó el 10% del total, una cifra similar a la última edición, cuando se alcanzó el 10,42% de visitantes extranjeros.Un factor a tener en cuenta en este balance es la celebración del salón del prêt à porter de París durante los mismos días en que se celebró la SIMM. A esta feria francesa acudieron 42.938 visitantes, lo que supuso sólo un 1% más que en la edición anterior. De todos ellos, el 57% son franceses, en tanto que el 43%, visitantes internacionales. España es uno de los países que más empresas expositoras lleva a París, sin embargo este año y quizá por la coincidencia de fechas con la SIMM, acudió un 13% menos de españoles a la capital francesa.Por su parte, la feria más grande de Europa, la CPD de Düsseldorf, registró en su última edición celebrada el pasado mes de julio 44.000 visitantes.En cuanto al número de expositores, acudieron 1.009 a la SIMM procedentes de 22 países; 1.054 a París y 1.500 a Düsseldorf de un total de 46 países. España, junto con Italia y Francia, es uno de los países con más presencia en todas estas ferias.