La Comisión Europea pide a Alemania que estabilice su situación política cuanto antes
Un día después de las elecciones, el futuro político de Alemania continúa incierto. El empate que mantiene a los dos principales rivales, la democristiana conservadora Angela Merkel y el socialdemócrata y canciller saliente Gerhard Schröder, en una tensa pugna por ocupar la Cancillería ha creado un clima de dudas que preocupa a los países europeos. El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, ha expresado su deseo de que el futuro político de Alemania, el principal motor económico de Europa, se decida ¢lo antes posible¢. ¢Necesitamos una Alemania fuerte y estable¢, dijo Barroso.
¢Alemania es el motor de Europa; sin una Alemania dinámica, Europa no se recuperará¢, añadió el presidente del Ejecutivo comunitario, al tiempo que recordó que este país es el principal socio comercial del resto de Estados miembros.
Posibles coaliciones
Sin embargo, el laberinto de posibles coaliciones para formar Gobierno ahora que ninguno de los dos grandes partidos, el SPD y CDU/CSU, han logrado la mayoría, embrolla el horizonte político inmediato. Tanto Schröder como Merkel se dan por ganadores, aunque técnicamente la candidata democristiana aventajó a su rival en un 1% escaso, y ambos continúan hoy reclamando su derecho a gobernar.
En la cúpula de la Unión Cristianodemócrata (CDU) se hacen oír las voces en defensa de Merkel. Es el caso del primer ministro del estado federado de Hesse, Roland Koch, quien se ha mostrado hoy convencido de que la candidata de su partido llegará a la cancillería. La propia Merkel ha anunciado iniciará conversaciones con todos los partidos (el Partido Socialdemócrata -SPD- de Schröder, el Partido Liberal -FDP- y Los Verdes) en busca de posibles alianzas, excepto con el Partido de la Izquierda, formado por la disidencia socialdemócrata y los poscomunistas del este de Alemania.
Algo similar ocurre en las filas del SPD. Su secretario general, Klaus Benneter, ha reiterado su convicción de que Schröder seguirá siendo canciller y ha considerado que hay "las más variadas constelaciones" para poder formar un Gobierno estable. "El resultado electoral dice que la gente no quiere a la señora Merkel, la gente quiere que Gerhard Schröder siga siendo canciller". Desde la cúpula, el SPD también ha acordado hoy hablar con todos los partidos sobre la posibilidad de una coalición de Gobierno, menos con el Partido de la Izquierda.
Votos pendientes en Dresde
Según los resultados, a falta de los votos de un distrito de Dresde donde sólo se votará el 2 de octubre por la muerte de una candidata, la CDU, junto con su ala bávara Unión Cristianosocial (CSU), son, con un 35,2%, el partido más fuerte pero con una ventaja mínima frente al SPD, con el 34,3%. Esa ventaja, sin embargo, no le da mayoría a la CDU para formar Gobierno con su socio ideal de coalición, el Partido Liberal (FDP), que obtuvo el 9,8% de los votos. Para el SPD tampoco hay una mayoría para formar una coalición con Los Verdes, su actual socio, con lo que se barajan otras variantes posibles.
Tanto el SPD como la CDU parecen de momento resistirse a la opción de una "gran coalición". Mientras algunos socialdemócratas han empezado a tirar sondas hacia el FDP para formar una alianza tripartita, los cristianodemócratas actúan de forma similar con Los Verdes. Verdes y liberales, sin embargo, no parecen tener ninguna intención de trabajar juntos en un Ejecutivo bajo ninguno de los dos modelos. Por su parte, el presidente de Los Verdes, Reinhard Bütikofer, considera una cooperación con los liberales más que improbable. Teóricamente, socialdemócratas y Verdes podrían sumar a su alianza al Partido de la Izquierda, que obtuvo un 8,7%. Sin embargo, esta opción ha sido descartada por las tres agrupaciones.
De igual forma, los candidatos del Partido de la Izquierda.PDS, Oskar Lafontaine y Gregor Gysi, que obtuvo ayer un 8,7% de los votos, han afirmadoque no aceptarán un Gobierno en minoría bajo la dirección de Schröder. "Su política es contraria a la nuestra", sentenciaron. Su posición, aunque todos los partidos rechazan una alianza con ellos, puede ser determinante en la composición del nuevo Gobierno. "Somos tolerantes pero no habrá tolerancia. Nuestra fracción no apoyará una política neoliberal, la haga quien la haga", dijo Gysi.