Nueva política en Japón

Como espectáculo político, las elecciones japonesas del domingo hubieran sido extraordinarias en cualquier parte, pero fueron particularmente impactantes en un país donde la política es tan emocionante como un cuenco de arroz sin condimentos. Tras perder una votación clave en materia de reformas económicas, el primer ministro, Junichiro Koizumi (...) convocó elecciones anticipadas y arrasó.

En el lado positivo, Koizumi ha demostrado que el atractivo político puede triunfar sobre los intereses creados (...). En el negativo, Koizumi se retirará en un año y las facciones internas de su partido pueden reorganizarse. Además, las elecciones del domingo han supuesto un duro golpe al opositor Partido Democrático, que había emergido como un rival plausible de los liberaldemócratas (...).

Las perspectivas de una reforma económica son poco claras (...). La propuesta del primer ministro sólo cambiaría el sistema postal gradualmente (...). Es posible que las elecciones del domingo traigan una mayor determinación militar nipona (...) que resulta preocupante a los ojos de sus vecinos, sobre todo China. Una cosa es que Koizumi apueste de manera extravagante en política, y otra es que juegue con el inestable equilibrio de una de las zonas más tensas del mundo.