Londres, Roma, París, Ginebra y Madrid las ciudades con los alquileres más caros de Europa
Londres es, con diferencia, la ciudad europea con los alquileres más elevados, seguida por Roma, París, Ginebra y Madrid, según un estudio hecho público hoy por la Federación Nacional del Inmobiliario (FMAIM) a partir de datos del primer semestre.
El precio medio del alquiler de una vivienda en Londres es de 35 euros por metro cuadrado y mes, antes de impuestos y otros gastos, según el estudio de la FNAIM. A mucha distancia le siguen Roma con 21,7 euros por metro cuadrado, París con 19,8 euros, Ginebra con 19,4 euros y Madrid con 16 euros.
Por debajo de los 15 euros se sitúan otras metrópolis del Viejo continente, como Barcelona, Amsterdam, Zúrich, Berlín, Fráncfort y Múnich. Entre las 12 ciudades de la relación, se sitúan por debajo de los 10 euros por metro cuadrado y mes Estocolmo (9,9 euros), Ámsterdam (9,7 euros) y Bruselas (9,5).
Amplia variedad de precios en Madrid
En el caso de las dos ciudades españolas, la FNAIM explica que en la capital los precios de los alquileres se movían en una amplia paleta entre los 19 euros en el barrio de Chamberí y los 18 del de Salamanca a los 13 de Moncloa y los 8 de San Blas. No obstante, las subidas más importantes entre mediados de 2004 y mediados de este ejercicio se dieron en San Blas (24,4%) y en Moncloa (12,3%), mientras que en Chamberí se quedaron en el 7,9% y en el 6,7% en Salamanca. En términos globales, los alquileres se incrementaron un 7,8% en un año, frente al alza del 3,5% en los doce meses precedentes. La FNAIM ha señalado que no se espera ningún aumento "significativo a finales de este año y comienzos del próximo.
Menor variación en Barcelona
Por lo que respecta a Barcelona, los precios variaban de los 13 euros por metro cuadrado y mes en Les Corts, Sarriá Sant Gervasi o Gracia a los 9 de Sant Martí o los 8 de Ciutat Vella.
Las subidas en la ciudad condal fueron más parejas, con un mínimo del 3,2% en Sarriá Sant Gervasi o el 3,5% en Sant Martí al 5,5% en el Eixample. La FNAIM tampoco espera un incremento significativo en Barcelona en los próximos meses.