El saldo neto con la UE desciende un 22% debido a la ampliación
España obtuvo un saldo financiero positivo de 3.889 millones de euros hasta junio como consecuencia de los flujos de ingresos y pagos que mantiene con la Unión Europea. Esta cantidad es 1.126 millones inferior (el 22,4%) a la percibida en el mismo periodo de 2004, cuando ascendió a 5.015 millones, según los datos del Banco de España.
Esta disminución viene justificada por la necesidad de incrementar la aportación nacional al presupuesto comunitario en 855,07 millones y una paralela disminución de los pagos comunitarios a España por 419,88 millones, según constatan los presupuestos de este año.
Tras la adhesión de los diez nuevos Estados miembros a la Unión Europea el 1 de mayo de 2004, este ejercicio es el primero en el que se reflejará presupuestariamente su plena participación durante un año completo, de acuerdo con las previsiones contempladas en las Perspectivas Financieras 2000-2006, que ahora están volviéndose a negociar de cara a los años futuros.
En el Anteproyecto de presupuesto de la Unión Europea para este año figuran créditos de compromiso por importe de 117.242,21 millones de euros y créditos de pago por 109.568,21 millones, lo que representa aumentos, en relación con las cuentas de 2004 del 5,24% y del 9,78% respectivamente.
Con carácter complementario a la aportación al presupuesto comunitario de los recursos propios necesarios para financiar las actuaciones de la UE, los Estados miembros realizan contribuciones al Fondo Europeo de Desarrollo (FED), a través del cual se distribuye parte de las ayudas que la UE concede a países en vías de desarrollo.
La dotación presupuestaria que prevé realizar España a la UE a finales de este ejercicio ascenderá a un total de 10.130,21 millones de euros, lo que representa un incremento del 9,22% respecto a lo presupuestado un año antes, según consta en las cuentas de este año elaboradas por el Ministerio de Hacienda.
En concepto de recursos propios se prevé que España aporte al presupuesto comunitario un total de 9.931,65, un 8,93% más que en el presupuesto anterior. La contribución al FED alcanzará los 198,56 millones, lo que significa un aumento del 25,8% respecto a la del ejercicio anterior.
Fondos estructurales
Por su parte, los fondos estructurales constituyen el principal instrumento de la política de cohesión económica y social de la UE y son cofinanciados conjuntamente entre ésta última y las administraciones públicas nacionales.
La dotación global para fondos estructurales aprobada en Berlín para el conjunto del periodo 2000-2006 asciende a 195.000 millones, de los que 43.087 millones son para España.
De ese global, el importe de transferencias correspondientes a fondos estructurales este año se eleva a 7.044,95 millones, lo que supone una disminución del 6,11%, por las menores aportaciones previstas tanto del Fondo Social Europeo como del Feoga. Así, para finales de este ejercicio, España espera obtener un saldo financiero neto en su relación con la UE de 5.629,37 millones de euros, inferior en 1.274,95 millones al presupuestado en 2004.
Blair retomará el debate presupuestario
Después del fracaso que cosecharon los mandatarios europeos en junio pasado en su intento por cerrar el escenario presupuestario de la UE para el periodo 2007-2013, con la vuelta de vacaciones está previsto que se retomen las conversaciones. En esta ocasión, las reuniones estarán además impulsadas por el primer ministro británico, Tony Blair, presidente de turno de la UE este semestre y uno de los protagonistas del desencuentro de junio por las exigencias planteadas para no vetar las nuevas cuentas.Reino Unido se mostró totalmente contrario a que se congele el conocido como 'cheque británico' (la cantidad económica que recibe este país desde 1984 en compensación por el escaso beneficio que recibe de algunas políticas comunitarias). La última propuesta de la presidencia luxemburguesa preveía la congelación del cheque en 2007 con una cuantía de 4.700 millones anuales y renunciaba a su reducción progresiva a partir de entonces.Por su parte, el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero tiene previsto continuar defendiendo con 'uñas y dientes' que la pérdida de fondos de cohesión sea progresiva y dejar para el año 2014 el momento en el que España pase a convertirse en contribuyente neto.