La confianza de los consumidores cae en julio por el pesimismo sobre la economía y el empleo
El Indicador de Confianza del Consumidor (ICC) elaborado por el Instituto de Crédito Oficial (ICO) ha retrocedido en julio en relación al mes anterior por la caída tanto de la valoración de la situación actual como las expectativas económicas para los próximos seis meses, a lo que se unen las peores perspectivas para el empleo.
En concreto el indicador de confianza ha retrocedido en julio cuatro décimas respecto a junio, mientras que el componente de economía familiar mejoró tanto en la situación actual como en las expectativas, con lo que sigue siendo el mejor valorado y el único aspecto para el que los consumidores esperan que la situación dentro de seis meses sea mejor que la actual.
El ICO considera que la mejor opinión de los consumidores sobre la economía familiar puede explicarse por la buena evolución de los datos publicados sobre el mercado laboral.
Sin embargo, los consumidores siguen creyendo que los precios subirán en los próximos doce meses más que el año pasado, que los tipos de interés serán superiores y que tendrán menos posibilidades de ahorro y de compra de bienes de consumo duradero.
Amenazas para el futuro
Precisamente, la volatilidad de precio del crudo alrededor de máximos históricos mantiene al petróleo como la "amenaza constante", lo que "puede ser la principal razón para la rebajas de las expectativas sobre la evolución de la economía española y del empleo, así como para las mayores perspectivas inflacionistas", ha añadido el ICO.
El organismo también ha estimado que el atentado en Londres "puede haber incrementado la incertidumbre" respecto al futuro cercano. "La pequeña corrección a la baja del índice de confianza este mes pude apuntar cautela por parte de los consumidores y moderación en el crecimiento de su demanda para los próximos trimestres", ha subrayado.
Otros datos destacados es que mejora la confianza en las provincias con PIB per cápita medio (entre el 85% y el 115% de la media nacional) como resultado de la mejora de los indicadores parciales y de todos sus componentes, con la excepción del componente de economía española del indicador parcial de situación actual.
A pesar de este avance, y aunque a muy poca distancia, el índice de confianza más elevado corresponde en julio a las provincias con un PIB per cápita alto (por encima del 115% de la media). Por su parte, las provincias con menor PIB per cápita mantienen la confianza más baja debido a las peores expectativas que manifiestan.
"En conclusión, la ligera disminución del ICC-ICO en julio parece indicar una disposición para el consumo prácticamente estable respecto al mes anterior, en línea con lo que apuntan otros indicadores de sentimiento del consumidor como la Comisión Europea para España y para la UE, y Conference Board para EEUU)", subraya el ICO.