British Airways eleva un 0,3% su participación en Iberia
Dicen que el amor está hecho de pequeños detalles. El proyecto matrimonial de Iberia y British Airways goza de buena salud a juzgar por la última iniciativa de la británica, que ha comprado algo más de tres millones de acciones de la aerolínea española, hasta completar una cartera de 94,3 millones de títulos.
La adquisición tiene un valor más bien simbólico. Supone tomar el 0,32% de Iberia, con una inversión valorada en 7,35 millones. Pero precisamente esta es la cantidad que British Airways necesita para volver a tener el 10% que hace un lustro compró en su aliada española en el momento en que la Sepi procedió a su privatización y que se había diluido por ampliaciones de capital.
Primer accionista
En realidad el paquete es compartido con American Airlines, a través de un holding en el que British controla el 90% y que con la compra de 3,018 millones de títulos se alza como primer accionista por delante de Caja Madrid, cuyo 10% de la privatización se ha visto diluido al 9,68%.
A parte de los vínculos accionariales, Iberia y British Airways comparten una posición de relevancia en la alianza global One World. La dinámica del mercado de la aviación civil, con las fusiones Air France-KLM y Lufthansa-Swiss, hace que estos clubes de líneas aéreas hayan perdido protagonismo.
El mercado, espoleado por los enlaces franco-holandés y germano-suizo, lo que espera de Iberia y British es que formalicen con una boda su más que dilatado noviazgo. Fernando Conte, el presidente de la española, vaticina en sus comparecencias que el enlace con British es un acontecimiento que no va a tardar.
Sin embargo, hasta la fecha sólo existe un proceso fusión de organizaciones y cuentas de explotación común en las rutas entre Madrid y Londres, del que los empleados directamente implicados no hablan con entusiasmo.