Cocina murciana actual en un local sorprendente
Hace un par de años que Pablo González, un joven cocinero curtido en numerosos fogones, se lanzó a la aventura empresarial de montar un negocio por su cuenta. Y lo ha hecho a lo grande, y en su tierra, Murcia. El restaurante La Cabaña, situado en la Urbanización Buenavista, en El Palmar (Tel.: 968 889 006) está dentro de la Finca Buenavista, un paraje de unos 15.000 metros cuadrados a escasos cinco kilómetros de Murcia. Se trata de un bonito complejo con jardines, palmeras y un lago, montado para la celebración de todo tipo de celebraciones sociales, una actividad que le permite rentabilizar la inversión acometida en el restaurante, abierto en marzo de 2004.
No es un local tradicional, ni mucho menos. Una cabaña octogonal de arquitectura sudafricana (realizada con materiales importados, como los largos juncos cocidos) acoge un comedor diáfano de aires étnicos, grandes ventanales y máscaras africanas a modo de decoración.
Un singular pero conseguido escenario para la cocina que Pablo González (que ha trabajado en locales como el mallorquín Flannigan, Las Cuatro Estaciones, en Madrid, o Arzak, en San Sebastián) ofrece de lunes a viernes al mediodía y los jueves por la noche. Su cocina, de carácter contemporáneo, se nutre de recetas y productos murcianos, de las verduras de la huerta y los pescados salvajes del Mediterráneo.
Con planteamientos y técnicas actuales llegan a la mesa platos como las chapinas (mollejas) de cordero con trufa de verano, el gazpacho de sandía con chipirones, los arroces melosos, los caracoles guisados con dátiles, la corvina con jugo de zanahoria y judías verdes, el taco de ventresca con fideos de verduras y naranja, la paletilla de cabrito confitada o el pichón a las cuatro cocciones.
Los platos cambian con frecuencia, y lo recomendable es pedir el menú degustación, compuesto por 10 platos (precio, 42 euros). Bodega interesante con muchas referencias extranjeras. El precio del menú a la carta ronda los 30-35 euros (sin vinos).