Los españoles suspenden en protección ocular
Las gafas de sol son imprescindibles para proteger correctamente los ojos frente a las radiaciones ultravioletas -pueden provocar queratitis (inflamación de la cornea) cáncer y cataratas-, sin embargo, el 61% de los españoles no las utiliza nunca y del resto, una parte de los usuarios no se protege adecuadamente. De los 29 millones de gafas de sol que se venden anualmente en España, el 30% procede de los top manta, según estimaciones del sector. Gafas de mala calidad, que no ofrecen garantías de protección.
Son algunas de las conclusiones de un estudio de General âptica sobre protección ocular basado en una muestra de 8.000 personas mayores de 15 años. El estudio dibuja un perfil de usuario de gafas de sol que corresponde a una mujer entre 15 y 34 años que, a la hora de comprar unas gafas, elige en la mayoría de los casos el modelo que más le favorece como factor prioritario por delante de la calidad y el nivel de filtro de los cristales.
Los ópticos llaman la atención sobre los peligros de utilizar este tipo de gafas y aconsejan ponerse en manos de los especialistas, ya que unas gafas de sol sin un filtro de calidad puede resultar más perjudicial que la exposición solar directa. Los filtros se clasifican en 4 niveles, dependiendo de la cantidad de radiaciones que reducen. En una situación solar normal, los filtros 2 -que reducen las radiaciones entre un 57% y un 81%- y los 3 -con una reducción del 82% al 91%- son suficientes.
Aunque asociadas con el verano, las gafas de sol son necesarias en todas las épocas del año, una recomendación que sólo sigue el 58% de los usuarios. El 45% de las personas que utilizan gafas de sol asegura tener dos modelos distintos de gafas y el 52% las compró en el último año. Entre la población que utiliza gafas graduadas (casi la mitad del total), únicamente el 4,5% usa las de sol con graduación, un dato alarmante para los especialistas puesto que son indispensables en situaciones como la conducción.
A la hora de elegir unas gafas de sol, el consumidor debe tener en cuenta que deben incorporar cristales sin efectos refractivos con el objeto de evitar deformidades en la visión, además, deben tener un tintado homogéneo y un filtro adecuado a la intensidad de la radiación social a la que el ojo va a quedar expuesto.