Líderes que desafían la jubilación
Alan Greenspan sopesa subir tipos de interés en EE UU a fines de mes, Kirk Kerkorian acaba de entrar en el capital de General Motors, Rupert Murdoch estudia abrir una cadena de televisión financiera en EE UU. La empresa de Sumner Redston, Viacom, ha aprobado una división de operaciones y su competidor, Charles Dolan, de Cablevisión, saca la suya de Bolsa. Son hombres activos, habituales de la prensa económica y con una media de edad de 80 años.
æpermil;stos y otros como Warren Buffett (74 años) y su mano derecha, Charlie Munger (81), o Maurice Greenberg (80), recientemente despedido de la aseguradora AIG, llevan la contraria a un estudio de 2005 de la consultora Spencer Stuart que afirma que la edad media de los consejeros delegados se ha rebajado en los últimos años y que las empresas del S &P 500 tienen como líderes a personas con una media de 50 años.
Los Buffett y Kerkorian son ejemplos de ejecutivos, altos funcionarios e incluso artistas (Frank Ghery sigue trazando planos a los 76 años y Giorgio Armani, 71, acaba de descubrir su vocación hotelera) que han pasado de largo el momento en el que se suele llegar al fin de la vida activa, los 65 años, y desafían la obligatoriedad de la retirada a una cierta edad en una era en la que la medicina permite una mayor esperanza de vida.
Greenspan juega al tenis y al golf, Murdoch hace gimnasia todos los días y Redstone monta en bicicleta o nada
Aunque no todos son como ellos. Desde Spencer Stuart se insiste en que estos casos imposibles de jubilar son raros, son hijos de un momento histórico concreto y se trata normalmente de fundadores de sus compañías, personas que tienen un importante paquete de acciones en ellas o son la imagen de una marca. Pero el cuidado de su criatura no es lo único que les mueve.
Warren Bennis, experto en liderazgo de la Universidad del Sur de California, explica que estas personas tienen en común 'un importante ego, la necesidad de mantener el estatus y el poder'. Bennis, coautor en 2002 del libro Geeks & Geezers, en el que se evalúa las cualidades de ejecutivos jóvenes y mayores, cree que la fuente de la energía de estos hombres viene de 'un alto nivel de compromiso con lo que les rodea', pero también de una permanente curiosidad, 'que es una característica de la juventud y en lo que creo que hay algo genético'. Bennis asegura que una parte de la fuerza viene de algo que anima a todo el mundo: 'cómo se superan las situaciones de estrés. Hay personas que emergen con fuerza de situaciones límite y no dejan que los reveses les hundan. Es importante ser positivo'.
El otro autor del libro, Robert Thomas, socio de Accenture y miembro de su Instituto para el Cambio Estratégico, asegura que 'el interés en seguir aprendiendo no nace de la necesidad de mantenerse jóvenes, sino que han sido así siempre, no es la adrenalina lo que les mueve, es la curiosidad'.
Ambos autores manejan la misma expresión gráfica para referirse a estas personas: 'tienen las cejas arqueadas siempre mostrando permanente sorpresa ante lo nuevo'. Thomas insiste en que no sólo les gusta aprender cosas nuevas, sino que además han enterrado ideas del pasado por lo que no son los defensores de los buenos viejos tiempos, sino que miran hacia adelante con intensidad.
'Todos ellos tienen un ego saludable, les gusta ser reconocidos por sus logros y para seguir siendo considerados y tener la atención de la gente tienen que seguir logrando cosas', asegura Thomas.
Para mantener esta actitud vital este especialista explica que los médicos hablan de la importancia de conservar la forma física, financiera e intelectual.
La foto teórica se corresponde con el cuadro real. Greenspan juega al tenis y al golf, Murdoch hace gimnasia todos los días y Redstone monta en bicicleta diariamente o nada. Muchos han cambiado su dieta.
Thomas también recalca que en el caso de los hombres es muy importante que mantengan una fuerte red de contactos sociales para que no se queden aislados socialmente. Este especialista asegura que se trata de un problema masculino porque las mujeres tienen una mayor sensibilidad a las relaciones sociales.
Bennis, quien tiene 80 años y habla de esta cuestión en primera persona, asegura que no le parece negativo que mantengan su liderazgo, aunque es bueno saber retirarse a tiempo ('quiero pensar que sabré detectar cuándo tengo que hacerlo') y dejar que las cosas sigan su curso. 'Hay que saber abandonar', dice.
Algunos se retiran, pero no del todo. Jack Welch (70 años), ex presidente de GE, acaba de escribir un libro, y John Bogle, fundador de la gestora Vanguard, sigue a los 76 años dando charlas y es un habitual comentarista económico. Bogle suele decir que tiene un corazón de 26 años al referirse a su edad, porque sufrió un trasplante en 1996 de un donante de esta edad. Thomas explica que no se retiran y mueren, sino que se mantienen activos, 'quizá no trabajan para su empresa, pero siguen haciendo cosas que para ellos representa un reto'.
Hay quien tiene claro que no va a abandonar. De Redstone se suele recordar una frase que dijo hace 13 años: 'Si supiera como controlar la empresa desde allí arriba o ahí abajo, lo haría'.
Sucesión, ese espinoso tema
Si a los problemas que plantean las sucesiones en las empresas familiares se suma el aura de los ejecutivos que actualmente rondan los ochenta, la cuestión del futuro no tan lejano se complica. Sustituir a Warren Buffett al frente de Berkshire Hathaway va a ser toda un odisea. Es algo que preocupa a los inversores y al propio Buffett, quien asegura que hay varias personas que pueden sentarse en su silla.Warren Bennis cree que este multimillonario inversor es brillante y lo que tiene que hacer, si no lo ha hecho ya, es planear que haya un grupo de personas que hagan de la sucesión algo natural.En el caso del presidente de Viacom se espera que Shari Redstone, hija de Sumner, sea la que herede el puesto. Ella tiene 51 años actualmente.También lo tiene difícil la Casa Blanca, que debe sustituir a Alan Greenspan al frente de la Reserva Federal el año que viene. Greenspan ha estado cinco legislaturas seguidas al frente de la Fed, lo que hace el puesto casi suyo a estas alturas. Las quinielas para su posible sucesión son cortas.
En EE UU no asustan las canas
A los estadounidenses no les asustan las canas. Sus ciudadanos eligieron a Ronald Reagan presidente cuando había cumplido 77 años, tienen un secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, de 73. En la televisión, Larry King, de 72 años, sigue haciendo sus entrevistas en la CNN y Barbara Walters, de 76, sigue en la televisión.Otro país que no retira, al menos del todo, a sus mayores es Japón. Según Robert Thomas, desde los noventa los japoneses han impuesto el retiro a partir de cierta edad, pero pueden permanecer en las empresas como mentores. 'Creo que es muy aconsejable, pueden ser los mejores profesores, aunque deben ser entrenados para ello porque no todo el mundo tiene la habilidad de serlo de forma natural', explica este especialista.