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ELECCIONES GALLEGAS

El PSOE considera una "misión imposible" que el voto emigrante dé al PP la mayoría absoluta

El secretario de Organización del PSOE, José Blanco, cree que es una "misión imposible" que el PP renueve la mayoría absoluta en Galicia, y ha confiado en que los socialistas puedan gobernar en esta comunidad junto con el BNG tras el recuento de los votos de los más de 70.000 emigrantes gallegos.

El País

Blanco, que ha comparecido en rueda de prensa tras la reunión de la Ejecutiva socialista para analizar los datos de las elecciones en Galicia, se ha mostrado convencido de que los resultados de su partido "van a mejorar con el voto de los residentes ausentes". "Ganamos anoche y ganaremos con el recuento del voto", ha asegurado el secretario de Organización del PSOE, quien ha puesto como ejemplo al Celta de Vigo, equipo que festejó en las últimas semanas dos veces su regreso a Primera División, ya que después de celebrar la subida fue sancionado con tres puntos y tuvo que ganar un nuevo partido para confirmar su ascenso.

El portavoz del PSOE ha considerado una "nueva derrota" los resultados del PP y se ha preguntado por qué los populares están tan satisfechos, cuando "han ganado a las encuestas pero han perdido el Gobierno de Galicia". Blanco ha reiterado su convicción de que el cambio es "irreversible" y de que el candidato del PSdeG, Emilio Pérez Touriño, será el presidente de la Xunta, ya que "estadísticamente es más fácil que el PSdeG alcance un diputado más por Ourense que el PP gane otro escaño por Pontevedra". "Galicia ha votado por el cambio", ha insistido Blanco, quien ha subrayado que la suma de votos de los socialistas y del BNG superan en 100.000 a los del PP, lo que denota una "mayoría social clara, una mayoría electoral contundente y una mayoría parlamentaria de cambio, lo que abre las puertas a la alternancia democrática".

Pontevedra, la provincia clave

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El PP tendrá que esperar a la semana que viene para saber si Fraga iniciará su quinto mandato al frente de la Xunta. Con el 100% de los votos escrutados, el PP obtiene 37 diputados, a uno de la mayoría absoluta, mientras que el PSdeG, en un avance espectacular, logra 25 escaños, ocho más que en los comicios de 2001. El BNG, por el contrario, pierde cuatro y se queda con 13 diputados. De mantenerse estos resultados una vez contado el voto extranjero, una posible alianza entre socialistas y nacionalistas desalojaría a Fraga del Gobierno.

Pontevedra es la provincia clave. El escaño de Pontevedra está provisionalmente en poder del PSOE por una diferencia de 8.160 votos, según datos derivados de aplicar la Ley D'Hont con el 100% escrutado. El último escaño por esa provincia, el número 22, se adjudica al PSOE con un resto de 21.068,6 votos. El siguiente resto que corresponde al PP es de 20.326,2 votos. Para que este último (que resulta de dividir la cifra total del PP por 11, pues sería su undécimo escaño) supere al del PSOE (que se obtiene dividiendo su resultado en esa provincia por 8, ya que se trata del octavo), precisa sumar 8.160 votos a los que tiene contabilizados hasta ahora. Hasta el 27 de junio se pueden recibir votos procedentes de la emigración, ya que será ese día cuando se realice el escrutinio.

En las elecciones de 2001, el PP obtuvo 13.292 votos procedentes de la emigración en la provincia de Pontevedra, mientras que el PSdeG logró 4.559 y el BNG 1.186. En esa provincia, la diferencia de votos de la emigración entre el PP y el PSdeG ascendió a 8.733.

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