Lechazo y vinos de ribera en las jornadas de Aranda
Un año más, y van cinco, el Consejo Regulador del Lechazo de Castilla y León, la Asociación de Hosteleros de Aranda, el ayuntamiento de esta ciudad y la DO Vinos de la Ribera del Duero organizan unas nuevas jornadas de lechazo en Aranda de Duero (Burgos), una cita que ya se ha convertido en tradicional en primavera.
Durante dos semanas, del 11 al 26 de este mes, catorce asadores arandinos mostrarán su maestría a la hora de preparar los deliciosos cuartos de cordero castellano-leonés, un producto con justa fama no sólo en Castilla sino en todo el país. Y es que el secreto de un buen lechazo está en la terneza y sabor inigualable de un cordero que sólo se ha alimentado con leche materna, siendo sacrificado con menos de un mes, cuando ha alcanzado entre cinco y siete kilos.
El de Castilla y León tiene Indicación Geográfica Protegida, un label de calidad que ampara exclusivamente a los procedentes de las razas autóctonas churra, ojalada y castellana, que se crían prácticamente en toda la Comunidad Autónoma. El mejor momento para tomar lechazo es precisamente en primavera, cuando la oveja come los nuevos pastos que dan sabor a la leche con que alimentará las crías (aunque este año la sequía y falta de hierba haya obligado a los ganaderos a echar mano de los piensos).
Su deliciosa carne no será lo único que pueda degustarse en estos días, porque junto al lechazo asado en horno de leña, plato estrella de las jornadas, los menús contemplan otra serie de productos y recetas típicas de la tierra, que varían según los establecimientos. Así, no faltará la riquísima morcilla de Burgos, el chorizo de la olla, el picadillo, el asadillo de pimientos o las croquetas. Y con los entrantes, platillos con otras partes del cordero, quizás no consideradas tan nobles pero que merecen ser probadas, como el paté de lechazo, las manitas, mollejas, menudillos, asadurilla y riñones, incluso una ensalada de lechazo en escabeche.
Largos, que no estrechos, los menús de algunos de los restaurantes participantes también ofrecerán revuelto de trigueros, pastel de verduras, duelos y quebrantos o ancas de rana. Lo que sí es común a todos es el delicioso y crujiente lechazo asado como manda la tradición (en barro, con un poco de sal, agua y paciencia, en los clásicos hornos abovedados alimentados con leña), acompañado de ensalada verde. Y para beber, como no podía ser de otra forma, un buen tinto de la Ribera del Duero, un maridaje indiscutible. El final dulce lo ponen los postres caseros, y para terminar café y un chupito.
El precio del menú, incluyendo los vinos, es de 32 euros. Pero el comensal no se traerá sólo el estómago lleno, porque, además, le regalarán un recuerdo gastronómico para llevarse a casa: morcilla y empiñonados de Aranda.
Durante las jornadas el Ayuntamiento de la localidad propone una serie de actividades gratuitas (visita a las bodegas subterráneas, recorridos monumentales, conciertos, etc.), una buena excusa para conocer la ciudad y, de paso, bajar la comida.
14 maestros asadores
Área Tudanca. Teléfono: 947 506 011.Mateo. Tel.: 947 505 693.Casa Florencio. Teléfono: 947 500 230.José María. Teléfono: 947 508 043.Casa Rafael Corrales. Teléfono: 947 500 027.El Lagar de Isilla. Teléfono: 947 510 683.Hotel Aranda. Teléfono: 947 501 600.Mesón de la Villa. Teléfono: 947 504 006.El Cordero. Tel.: 947510552.El Pastor. Tel.: 947.500.428.Mesón el Roble. Teléfono: 947 502 902.Tres Condes. Teléfono: 947 502 400.Venta Los Rastrojos. Teléfono: 947 561 143.El Ciprés. Tel.: 947 507 414.