Bancaja y la CAM liquidarán la empresa mixta que crearon hace tres años
Bancaja y la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) están dispuestas a liquidar Cartera de Participaciones Empresariales (CPE), la empresa conjunta que crearon hace tres años. La voluntad de las dos entidades sólo se verá alterada si hay un acuerdo político, igual que ocurrió en su constitución.
CPE entra en lo que muchos consideran su último mes. Las dos entidades tienen hasta finales de junio para renovar el consejo de administración de CPE, compuesto por 12 consejeros nombrados al 50% por cada caja. Eso es en teoría, porque en realidad son PP y PSOE quienes negocian los nombramientos. La renovación está parada por falta de acuerdo en el seno del PP, donde los seguidores de Eduardo Zaplana y los de Francisco Camps no han sido capaces de consensuar los nombres de los consejeros que representarían a los populares por parte de la CAM.
El pasado jueves, la entidad que preside Vicente Sala celebró el consejo de mayo y no trató el asunto. Se volverá a reunir a finales de junio. La intención de la caja es dejar correr el tiempo y enterrar una sociedad. Bancaja, para cuyos representantes sí hay acuerdo, tampoco hará nada por salvar la situación. Fuentes de las dos cajas señalaron que la resurrección de CPE sólo se entiende desde el interés político de nombrar a unos consejeros muy bien remunerados.
CPE se creó como solución a la frustrada fusión de las dos cajas impulsada por Eduardo Zaplana. En ella se integraron las participaciones de las cajas en Abertis, Ribera Salud, entre otras empresas casi inactivas. Durante estos años no ha realizado ninguna inversión y sólo anunció la creación de un fondo de capital riesgo del que nunca más se supo.