El cumplimiento de las nuevas normas abruma a las empresas
Las normas de buen gobierno, la nueva contabilidad o las reglas de protección de datos personales son sólo algunas de las nuevas leyes con las que deben vérselas las empresas en los últimos tiempos. Un estudio realizado entre directivos de todo el mundo señala que estas nuevas obligaciones suponen la adopción de cambios en la gestión del negocio.
En 2004 las compañías de Estados Unidos invirtieron 5.500 millones de dólares para cumplir con la regulación Sarbanes-Oxley de buen gobierno. Durante los dos próximos años los bancos europeos prevén inversiones, especialmente en el capítulo de tecnologías de la información, por valor de 4.000 millones de dólares para hacer frente a la normativa financiera Basilea II. Son sólo dos ejemplos de los gastos y los cambios a los que se están enfrentando las empresas en todo el mundo.
De acuerdo con los datos de un estudio realizado por The Economist Intelligence Unit en colaboración con la consultora Mercury Interactive, entre más de 800 directivos de empresas de Estados Unidos, Europa, Oriente Próximo y Asia-Pacífico, para las empresas encuestadas, y en especial para las grandes empresas, el cumplimiento de estas nuevas normas constituye hoy en día una prioridad estratégica para sus tecnologías de la información (TI).
Y a pesar de la mayor carga de inversión y de trabajo, las empresas esperan obtener beneficios futuros de las nuevas regulaciones. Los directivos consideran que el principal beneficio es la mejora de los informes financieros. Un 54% de los encuestados en EE UU y un 60% de los de la región EMEA (Europa y Oriente Próximo) y el mismo porcentaje en el caso de España, señala que el cumplimiento de estas las iniciativas va a hacer posible que las empresas sean más transparentes y suministren informes financieros más precisos.
El estudio también señala que tras los escándalos financieros y la cada vez más intensa globalización, las normas que deberán cumplir las empresas tenderán a ser también más intensas, por lo que no es previsible que se reduzca esta nueva carga de trabajo derivada del cumplimiento de nuevas leyes que implican mayor transparencia.
Contabilidad y datos personales
El estudio de The Economist Intelligence Unit destaca también las principales preocupaciones de los directivos españoles. Las tres normativas que más les preocupan por su impacto en las operaciones de tecnologías de la información (TI) son la ley de protección de datos, las normativas contables internacionales y Basilea II. El 70% de los entrevistados señala que en estos momentos, el mayor impacto se está produciendo por la adaptación de los sistemas para cumplir con la Ley de Protección de Datos de Carácter Personal.Le siguen otras normativas, cuyo impacto en las operaciones de TI es valorado en función de su alcance -en la medida en que no todas las empresas deben aplicarlas- y la proximidad de su entrada en vigor: para un 40% de los directivos españoles las normativas contables internacionales (IAS/IFRS), para un 27% las normativas locales y para un 35% Basilea II.Otras normativas cuyo impacto incidirá en menor medida en las TI de la empresas españolas son las regulaciones Sarbanes-Oxley, ya que sólo afecta a las multinacionales que cotizan en las Bolsas estadounidenses.