El cierre patronal agrava el conflicto en la industria papelera finlandesa
La Federación de Industrias Forestales de Finlandia inició ayer un cierre de todas las fábricas de papel y celulosa del país que durará al menos cuatro semanas para presionar a los sindicatos para que acepten un nuevo convenio laboral. Las largas negociaciones entre los empresarios y el Sindicato del Papel se interrumpieron anteayer por falta de acuerdo.
El cierre patronal es la respuesta a las movilizaciones obreras que paralizaron la poderosa industria papelera finlandesa durante dos días a comienzos de esta semana.
El convenio propuesto por los empresarios contempla medidas para aumentar la flexibilidad y reducir los costes productivos, con el fin de mantener la competitividad. Entre otras aspiraciones, la patronal pretende terminar con el cierre de las fábricas durante las festividades de Navidad y de San Juan, así como que se les permita la libre subcontratación de ciertos servicios a empresas ajenas al Sindicato del Papel.
Según cálculos de la patronal, sólo la aplicación de estas dos medidas permitiría a las compañías papeleras ahorrar unos 1.500 millones de euros anuales.
Para los líderes sindicales, las propuestas de los empresarios son inaceptables y el cierre patronal, que inicialmente iba a durar dos semanas, indica que no están realmente dispuestos a negociar.
El cierre de las fábricas papeleras, cuya producción se estima en 40 millones de euros diarios, podría afectar a corto plazo a la industria forestal y química, sus principales proveedoras, así como al transporte.
Está previsto que empresarios y sindicatos se sienten de nuevo a negociar mañana.