_
_
_
_
Discapacitados

El miedo frena la integración laboral

María José es auxiliar de enfermería y trabaja directamente de cara al paciente en un hospital de USP en Murcia. Esta historia no tiene nada de llamativo salvo porque María José sufre el Síndrome de Down, algo que no le ha impedido ser una enfermera eficaz que ha sabido ganarse el respeto y el cariño de sus compañeros.

En USP ésta no es una experiencia única, pues Enrique lleva años en el departamento administrativo del Hospital Dexeus, del mismo modo que Luis se ha integrado perfectamente dentro de una de las consultoras más competitivas del mundo, The Boston Consulting Group, donde se hace cargo del correo interno, la reposición de la nevera y encuaderna fotocopias.

æpermil;stos son sólo algunos de las múltiples experiencias de algunas empresas que han decidido hacer de su responsabilidad social una realidad factible. Todas estas experiencias, que quieren servir de ejemplo para que los empresarios pierdan el miedo a contratar a personas con discapacidad, se expusieron en la feria ExpoManagement la semana pasada que dedicó un conferencia en exclusiva a la integración laboral.

'¿Dónde están los ejecutivos?', se preguntaba Gabriel Masfurroll, de USP Hospitales, que echaba de menos que entre la audiencia no hubiese ni uno de esos altos directivos que se llenan la boca en otros círculos hablando de responsabilidad. Todos los presentes coincidieron que el avance en este área no se va a conseguir con leyes, ni con subvenciones, ni con sanciones para quienes no cumplan con el cupo del 2% exigido por ley.

'Si queremos que la integración funcione, hay que generar una cultura. A nadie le debería chocar trabajar con un discapacitado', asegura Guillermo de Rueda, director de la Fundación Solidaridad de Carrefour, que ha conseguido empleo dentro de sus supermercados para 578 discapacitados. 'Creo que es más fácil que la integración se contagie por ósmosis que por percusión, por eso es fundamental que haya empresas que sirvan de ejemplo, que sean las que tiren de este proyecto', asegura Luis Conde, presidente la empresa de headhunting Seeliger & Conde, que creó una organización paralela, Word Point, para buscar empleo a discapacitados, que el pasado año colocó a 50 personas.

El verdadero problema es el temor provocado por el desconocimiento. 'Nuestro proyecto se quedó en el congelador porque no sabíamos qué pasos seguir. Y luego estaba el miedo a no saber qué sucedería si la experiencia no resultaba, si decidíamos rescindir el contrato', recordaba Iván Marten, vicepresidente de The Boston Consulting Group cuando se planteó la idea de contratar a Luis.

Los miedos que surgen al hablar de integración tienen que ver con cómo se relacionarán con el resto de los empleados, creer que se le debe un trato especial o si siempre necesitarán un supervisor

Pero estas dudas se disipan en la práctica y quien se ha lanzado a contratar a alguien que sufre una discapacidad acaba alabando su compromiso con la empresa, su dedicación y su capacidad para crear ambientes de trabajo muy agradables.

Puentes para llegar hasta la empresa

Las buenas experiencias no significan que integrar a una persona discapacitada sea una tarea sencilla. Hay que seguir un proceso y es bueno que en los primeros meses haya una persona que le asesore hasta que coja confianza. Existen organizaciones que trabajan especialmente para que las corporaciones se olviden de estas cuestiones y facilitar todos los aspectos, desde la formación hasta el papeleo para las subvenciones. æpermil;stas son algunas:l Proyecto Stela: La Fundación Síndrome de Down de Madrid tiene este programa desde 1995. Se encargan de analizar el puesto de trabajo a cubrir, selecciona al candidato, informa sobre los procedimientos para la contratación, asesora al personal de la empresa y ofrece un seguimiento del trabajador.l Invest4Children asesora a las empresas sobre las asociaciones que ayudan a la integración laboral.l Icaria Iniciativas Sociales hoy es un 86% propiedad de las personas con discapacidad que trabajan en ella. Hacen labores de formación, en artes gráficas y hostelería y cuentan con su propio albergue, In/Out, con un restaurante que atiende en todas las áreas una plantilla formada en el 90% por personas con alguna discapacidad.l Aese, la asociación española de empleo con apoyo, es otra fuente de información fundamental.

Archivado En

_
_