Un poste para salvar vidas en minutos
Cada año fallecen en España 20.000 personas a causa de la muerte súbita cardiaca. El 60% de los afectados no llegan a recibir asistencia médica alguna. Para prevenir a este problema, Telefónica ofrece a partir de hoy un servicio de cardioprotección avanzada.
'La columna de rescate cardíaco es un dispositivo diseñado para los lugares con gran afluencia de gente, como centros comerciales polideportivos o estaciones de tren', explica José Aspas, consejero delegado de Telefónica Telecomunicaciones Públicas (TTP).
La muerte súbita es la principal causa de muerte natural en los países desarrollados. Este ataque se debe a una alteración en la conducción eléctrica del corazón y se hace patente en una pérdida brusca del pulso y del conocimiento. La situación sólo se puede revertir aplicando una descarga nada más manifestarse los primeros síntomas. El tiempo es crucial para salvar la vida del paciente: por cada minuto que pasa, las posibilidades de sobrevivir se reducen entre un 7% y un 10%.
Desde la filial de Telefónica destacan que 'la gran diferencia que tiene el poste respecto a los desfibriladores que ya están implantados en los países anglosajones, es el servicio integral que lo acompaña. Tener un aparato no garantiza que este funcione cuando hace falta. Hemos convertido en un servicio lo que antes era la venta de una máquina'.
Contratar la cabina de rescate cuesta 250 euros al mes. A cambio, TTP instala el aparato y se ocupa de su mantenimiento. Además, la compañía imparte un curso de primeros auxilios al personal de la entidad cliente. 'Los equipos de emergencias de las empresas y los guardias de seguridad son los candidatos ideales para recibir la formación', indica Aspas.
La desfibrilación precoz permite ganar tiempo para la llegada de sanitarios profesionales capaces de estabilizar al afectado. Cuando es activada, la cabina llama de manera automática a los servicios de emergencia. En Telefónica afirman que esta iniciativa ha sido acogida con mucho interés y que, en breve, mantendrán contactos con las distintas comunidades autónomas para la implantación del dispositivo en edificios públicos. Sin embargo, su gran esperanza es el sector privado. 'El despliegue será más rápido ahí porque para negocios como un hotel representa una forma de ofrecer un servicio añadido a sus clientes'. TTP espera instalar 20.000 postes en los próximos tres años.