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El presidente de Ford no cobrará hasta que mejore el resultado

William Clay Ford, presidente del más antiguo fabricante de automóviles, anunció ayer que no cobrará hasta que no mejoren los resultados de la filial de automoción. El biznieto de Henry Ford anunció ayer a los accionistas de la compañía que 'renunciará a cualquier compensación' hasta que los resultados no sean de su agrado. Bill Ford cobró 22,2 millones de dólares (17,2 millones de euros) el pasado ejercicio en concepto de opciones.

El directivo, además, aprovechó la junta de accionistas celebrada ayer en Chicago para pedir al comité de retribuciones que ligue las remuneraciones de forma más directa a los resultados de la compañía.

El mes pasado, la compañía lanzó un aviso de que las operaciones en el negocio automovilístico lograrán el punto de equilibrio 'en el mejor de los casos'. Este anuncio, de hecho, motivó que la agencia de calificación Standard & Poor's rebajase a la empresa a la consideración de bono basura. Ayer, Moody's también rebajó el rating que concede al fabricante hasta dejarlo en Baa3, apenas un nivel por encima del grado de no inversión.

Según la agencia, los principales problemas que afronta Ford son la necesidad de combinar rentabilidad y aumento de cuota de mercado en Estados Unidos, la costosa estructura de costes derivada del exceso de capacidad productiva, la subida de los precios de las materias primas, las obligaciones en materia de pensiones y prestaciones sanitarias y la necesidad de reorganizar la relación con Visteon, su antigua filial y su principal proveedor.

El grupo Ford, tercer fabricante mundial de automóviles, obtuvo un beneficio neto de 1.212 millones de dólares (932,3 millones de euros) en el primer trimestre del año, lo que supone una reducción del 37,9% respecto al mismo período de 2004.

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