Unión Fenosa afronta su junta anual en medio de cambios accionariales
La voluntad de Caixa Galicia y la CAM de reforzar su presencia en el capital de Unión Fenosa se mantiene, mientras el principal accionista, el SCH, da muestras de retirada. La revalorización de la acción ha marcado los últimos meses.
La acción de Unión Fenosa cerró ayer a 24,01 euros y su revalorización en lo que va de año se sitúa en el 24,08%. La compañía eléctrica que preside Antonio Basagoiti se encuentra en una encrucijada accionarial que estaría marcando su comportamiento bursátil. Por un lado, su principal accionista, el SCH, con un 22% del capital, ha mostrado claros signos de buscar una retirada de la compañía. Por otro, a Fenosa no le faltan socios con voluntad de reforzarse.
Concretamente, Caixa Galicia, que ya es el segundo accionista con un 8% del capital, quiere alcanzar el 10%. Y también la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) y Caixanova, actualmente con un 4,04% y un 4,02%, respectivamente, han expresado su intención de llegar al 5%.
El poder de las entidades de ahorro alcanzarían, de este modo, el 20%.
Sin embargo, según calculan los analistas, las cajas no procederán a realizar esta inversión en tanto no se estabiliza el precio de la acción que, por otro lado, en su opinión, está influido por la intención del banco de vender.
Recientemente, Unión Fenosa, llegó a un acuerdo con sus socios de Auna para iniciar un proceso ordenado para la venta de sus participaciones en la operadora, para lo que han contratado a Merrill Lynch. Los accionistas manejan una valoración de 12.500 millones de euros. La eléctrica tiene en estos momentos un 18,7% del capital. Esta desinversión y el posible desbloqueo del conflicto legal a lo largo de este año que mantiene el SCH con Total sobre Cepsa, permitiría a Fenosa liberar también el 5% que tiene en esta petrolera, que lleva año y medio inmovilizado por las medidas cautelares impuestas por el árbitro que dirime el conflicto.
A todo gas
Por el lado de los negocios, Fenosa se mantiene firme en su apuesta por el gas. En 2004, los ingresos por esta actividad se multiplicaron por cuatro, lo que permitió superar su aportación al consolidado, pese al efecto del cambio de la venta a ENI del 50% de Unión Fenosa Gas.
El año pasado, la compañía fletó dos buques metaneros que completan su cadena del gas, después de que inaugurara en el otoño la planta de regasificación de Damietta, en la costa mediterránea de Egipto. También el año pasado, la compañía eléctrica comenzó a importar gas de Omán para su mercado en España.
La cifra de negocios de Fenosa superó los 5.800 millones, un 4,4% más que la del mismo periodo del año anterior. Este incremento se produjo pese a la salida del negocio de distribución de República Dominicana. El resultado neto alcanzó los 397,5 millones con un crecimiento del 6,6%.
Como el resto de las empresas del sector, Fenosa ha estado sometida a algunos de los cambios normativos que se han producido en los últimos meses: la asignación de derechos de emisión de CO2, la internalización del coste de la gestión de residuos nucleares y el nuevo reparto del déficit de tarifa.