Caldera descarta ampliar el plazo para regular inmigrantes
Miles de inmigrantes volvieron a hacer largas colas ayer a las puertas de ayuntamientos y organismos públicos en busca del documento oficial que acredite su estancia en España con anterioridad al 8 de agosto y poderse acoger así al empadronamiento por omisión2.
Pese a esta nueva circunstancia, el ministro de Trabajo, Jesús Caldera, negó ayer férreamente la posibilidad de ampliar el plazo para la regularización más allá del 7 de mayo, que es el último día previsto para el proceso.
El motivo de este rechazo es, según Caldera, que los requisitos para la legalización 'ya se han interpretado con flexibilidad'.
El ministro consideró lógicas las aglomeraciones de inmigrantes en estos primeros días en los que los trabajadores extranjeros se pueden acoger al empadronamiento por omisión.
Según las estimaciones del Caldera, con las 400.000 solicitudes presentadas hasta la fecha y la presumible aceleración del proceso que Trabajo prevé que se producirá en las tres semanas que restan, el número total de solicitudes se acercará a las 700.000, 'muy cerca del máximo total de personas legalizables'.
Por su parte, la secretaria de estado de Inmigración, Consuelo Rumí, pidió ayer a todos los inmigrantes que no tengan un contrato de trabajo que 'se abstengan de acudir a los ayuntamientos a pedir el certificado de empadronamiento de omisión', ya que 'obstaculizan al que de verdad lo necesita', dijo.
Rumí aseguró que 'hay tiempo suficiente' para solicitar la regularización y añadió que la Administración ha habilitado ya 'todos los recursos para la entrega de las solicitudes y la documentación' y que se ha llevado a cabo una ampliación de horarios para hacer frente a esta nueva situación.