Móviles se enfrenta en arbitraje a los ferrocarriles estatales de Italia
La paralización de las filiales de UMTS de Telefónica Móviles repartidas por Europa sigue generando conflictos judiciales. El último en conocerse ha sido el de Italia, donde la operadora española y sus socios se enfrentan en arbitraje a los ferrocarriles estatales, según el informe de auditoría.
En octubre de 2000, la compañía que ganó la licencia de telefonía móvil de tercera generación en el país transalpino, Ipse, llegó a un acuerdo con Ferrovie dello Stato para tener derecho de acceso y uso sobre determinadas infraestructuras de la compañía pública. Tres años después y puesto que la actividad de Ipse se congeló y el proyecto nunca llegó a ver la luz, la licenciataria notificó su decisión de rescindir el contrato con la empresa de ferrocarriles.
Ipse argumentó que el contrato de arrendamiento estaba sujeto a rescisión unilateral en el supuesto de concurrencia de circunstancias excepcionales, pero Ferrovie dello Stato no estuvo de acuerdo.
Ante la falta de entendimiento, las dos partes han decidido acudir a un procedimiento arbitral que solucione las controversias, entre otras cosas porque Telefónica ha garantizado hasta 48,2 millones de euros de las cantidades adeudadas en virtud del contrato.