Citigroup contrademanda a Parmalat por sus pérdidas en la quiebra
El mayor conglomerado financiero de Estados Unidos, Citigroup, ha presentado una demanda contra la firma italiana Parmalat por los daños que dice haber sufrido a consecuencia del colapso de la compañía lechera italiana.
La acción legal iniciada la semana pasada es en respuesta a la presentada en 2004 por Parmalat en Nueva Jersey contra Citigroup, a quien acusaba de continuar sus negocios con la empresa láctea pese a conocer la condición real de sus finanzas.
La demanda de Parmalat exige una compensación de hasta 10.000 millones de dólares. Citigroup alega que las acusaciones en su contra son falsas y que no tenía conocimiento del verdadero estado financiero de Parmalat, a la que acusa de falsificar documentos y abusar de la confianza del banco.
'Citigroup es una víctima del fraude de Parmalat y ha perdido como resultado de ello más de 500 millones de euros', aseguró en un comunicado William Mills, presidente ejecutivo de banca corporativa y de inversión del banco para Europa, Oriente Próximo y África.
'Citigroup no tenía nada que ver con estos fraudes y no estaba al tanto de ellos', agrega Mills, quien concluye que 'si Citigroup hubiese conocido la verdad no hubiese hecho negocios con Parmalat'.
La compañía italiana se declaró en bancarrota en diciembre de 2003 tras un escándalo que involucró el descubrimiento de deudas de 14.000 millones de euros.
La contrademanda de Citigroup se presenta después de que el 28 de febrero pasado el juez que lleva el caso fallara en contra de la petición del banco de desestimar los cargos en su contra.
En la demanda presentada por Citigroup se nombra al presidente ejecutivo de Parmalat, Enrico Bondi, quien en su periodo como administrador de la empresa presentó demandas contra Citigroup y otros 50 bancos por lo que considera el papel que habrían jugado en la quiebra de la compañía.
Emisiones
Morgan Stanley y UBS ayudaron a Parmalat a ocultar el coste real de una emisión de deuda realizada meses antes de la crisis, según un informe de los fiscales de Milán. Si se hubiera conocido el coste real, el precio de otros bonos de la empresa hubiera caído.