Gas Natural retira las demandas contra Argentina
Gas Natural se ha permitido un gesto con Kirchner. La compañía española ha anunciado que retirará sus demandas contra Argentina en un movimiento que trata, por un lado, de allanar el camino a un acuerdo sobre tarifas y, por otro, de afianzar la buena relación de la propia Repsol YPF con el Gobierno argentino.
Gas Natural ha anunciado que desistirá de sus demandas contra Argentina ante un tribunal del Banco Mundial por la congelación de las tarifas desde 2002. La compañía se lo comunicó ayer a los ministros de Economía, Roberto Lavagna, y de Planificación, Inversión y Servicios Públicos, Julio de Vido, mano derecha del presidente Néstor Kirchner y encargado de la negociación. Las querellas contra Argentina han generado el enfado de Kirchner, que se lo había trasmitido a su par español, José Luis Rodríguez Zapatero, en enero pasado.
Fuentes del mercado de energía consideran que la decisión de Gas Natural constituye un gesto de buena voluntad vinculado con su alianza con Repsol YPF, que tal vez sea la empresa española con mejor relación con Kirchner. Desde que Antoni Brufau dejó la presidencia de la empresa de gas para ocupar la de la petrolera, ambas comenzaron a trazar estrategias de negocios juntas. Brufau, a su vez, mejoró el diálogo de Repsol con el Gobierno de Argentina, donde genera el 40% de sus recursos. Ahora Gas Natural también se sumará al club de amigos del irascible presidente argentino.
La propietaria de Gas Natural BAN, la distribuidora de 30 ayuntamientos de los suburbios de Buenos Aires desde 1992, expresó su 'firme decisión de proceder al retiro del reclamo' ante el Centro Internacional de Arreglos de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi), del Banco Mundial, por la ruptura unilateral del contrato en 2002. En aquel tiempo, el gobierno de Eduardo Duhalde desdolarizó y congeló las tarifas ante la devaluación del peso en la que había desemboscado la crisis económica, política y social de la tercera economía latinoamericana. Gas Natural no había cuantificado la suma del perjuicio, pero fuentes del Gobierno argentino preveían que la querella ascendería al equivalente a unos 197 millones.
Las cuatro empresas españolas que mantenían demandas contra Argentina (Gas Natural, Telefónica, Endesa y Aguas de Barcelona, Agbar) habían explicado a Zapatero en Buenos Aires que estaban dispuestas a desistir de la vía judicial, pero en el marco de la negociación integral del contrato, en la que también se incluyen factores como las tarifas, las exigencias de inversión, la calidad del servicio y las multas acumuladas contra las operadoras por incumplimientos contractuales.
Gas Natural finalmente retiró la querella antes de un acuerdo con el Gobierno argentino, pero fuentes de la filial local reconocieron que está avanzándose en su definición. De hecho, la casa matriz reconoció en un comunicado 'su plena confianza en que Gas Natural BAN arribe a un acuerdo justo y razonable de renegociación de su contrato'. El día en que declaró la salida de la suspensión de pagos, hace dos semanas, Kirchner había declamado que rechazaba la incumbencia del Ciadi, pese a que figuraba en los contratos de privatización de la década pasada.
El Gobierno había ofrecido en enero a todas las empresas de energía una solución similar que la alcanzada un mes antes con la pequeña eléctrica Edelap: un aumento del 15% de las tarifas para este año, una nueva negociación sobre precios en 2006, la condonación de las multas, un nivel de inversión obligatorio y la retirada de la demanda ante el Ciadi. Mientras que las eléctricas Edesur (Endesa) y Edenor (Electricité de France) la rechazaron, Gas Natural BAN se limitó a responder que la estudiaría. Los borradores del contrato van y vienen de la empresas al Gobierno.
El boicot funciona
Las ventas de Shell en Argentina cayeron hasta un 70% tras el llamado del presidente Néstor Kirchner a un boicot contra la petrolera por haber subido sus precios, según estimaciones difundidas ayer por la Federación de Empresarios de Combustibles.
Tres juicios pendientes
Con la retirada de la demanda de Gas Natural contra Argentina, sólo quedan tres compañías españolas con litigios contra este país suramericano. El mayor de ellos es de Telefónica, por 2.834 millones de dólares (unos 2.100 millones de euros). Endesa exige 1.800 millones de dólares y Aguas de Barcelona (Agbar), junto con la francesa Suez, accionista de Aguas Argentinas, 1.700 millones de dólares. Todas reclaman contra la desdolarización y congelación de tarifas de 2002, en plena devaluación del peso.Telefónica de Argentina y Edesur (Endesa) han evitado la suspensión de pagos, pero no Aguas Argentinas y Metrogas (40% de la británica BG y 30% de Repsol YPF). Edesur y Metrogas, al igual que Gas Natural, han sido convocadas a audiencias públicas para discutir con las asociaciones de consumidores y las cámaras de televisión delante la propuesta de solución que el Gobierno les formuló de manera unilateral, sin haber alcanzado aún un acuerdo, y que incluye un alza del 15% de tarifas para este año y una nueva negociación en 2006.Edesur tiene turno el 20 de abril; Metrogas, el 22, y Gas Natural BAN, el 13 de mayo. La discusión con Aguas Argentinas es quizá la más tensa. Kirchner ha amenazado con la reestatalización por falta de inversión y rechaza un alza de tarifas. La negociación con Telefónica está estancada y parece menos urgente. Abertis, concesionaria de dos autopistas, llegó a un acuerdo que implicó la renuncia al Ciadi.