El FMI debe imponer duras condiciones a Argentina
Argentina se la jugó y el riesgo valió la pena. Acosando a los acreedores privados para que aceptaran un penoso acuerdo para reestructurar una deuda de 100.000 millones de dólares ese país ha reescrito las normas del juego financiero en los mercados emergentes (...).
Argentina y el Fondo Monetario Internacional (FMI) tienen que decidir ahora cuál es el próximo paso. El Fondo debería dejar claro que reanudará sus préstamos a Argentina sólo bajo estrictas condiciones (...). Sin una normalización de las relaciones financieras externas y reformas estructurales internas, su triunfo tendrá corta vida (...).
Ahora la economía está encontrado límites para crecer en la falta de capacidad instalada, y necesita reformas estructurales y nuevas inversiones. (...)
Si Argentina dice no, el FMI no debería ofrecer más préstamos (...). Algunos capitales privados podrían volver a Argentina de cualquier manera. Pero sin el apoyo del FMI, éstos serán probablemente capitales especulativos (...). Estados Unidos podría resistir tal perspectiva, temerosos de que esto pueda empujar al presidente, Néstor Kirchner, a los brazos de Hugo Chávez, el antiestadounidense presidente de Venezuela.
Financial Times, Londres