Los ejecutivos apuntan fuera de su negocio
La posesión de Sicav (sociedades de inversión de capital variable) no es exclusiva de las grandes fortunas tradicionales. Los ejecutivos de algunas de las principales compañías cotizadas españolas también disponen de este tipo de vehículos de inversión. En la mayoría de los casos los utilizan para diversificar su patrimonio, ya que una parte considerable del mismo está comprometido, bien de forma directa bien de forma interpuesta a través de una sociedad limitada, en acciones de la propia compañía que dirigen. Cumplen por lo tanto con el viejo axioma bursátil de no poner todos los huevos en la misma cesta.
Un claro ejemplo es César Alierta. El presidente de Telefónica tiene el 0,013% de la operadora, participación que tiene un valor de mercado de 8,94 millones de euros. Además dispone de una Sicav, Grupo Arce de inversiones, gestionada por Urquijo, que a 31 de diciembre pasado manejaba un patrimonio de 10,17 millones.
El estilo de inversión de Alierta se puede considerar agresivo. El 72% del capital lo destina a la renta variable. El valor que más pondera en la cartera de Grupo Arce es Altadis, compañía que presidía Alierta antes de coger las riendas de Telefónica. A la antigua Tabacalera destina esta Sicav el 10,44% de su cartera (1,07 millones). Logista y Aldeasa, las dos filiales cotizadas que tiene Altadis, también tienen protagonismo en la cartera, con el 5 y el 3% del patrimonio. Otras de las mayores apuestas de Alierta son BBVA y Sol Meliá. En la parte de la cartera destinada a la renta variable internacional no aparece ni una sola teleco. Una compañía minera brasileña, Vale Río, ING y Allianz son las que más pesan en este apartado.
Mientras César Alierta y Francisco González son más agresivos, con el 70% en acciones, Castellano es más conservador y destina el 69% a la renta fija
González prefiere los fondos
Otro ejecutivo con una estrategia de inversión arriesgada es Francisco González. El presidente del BBVA tiene 1,14 millones de acciones del banco, el 0,034% del capital, cuyo valor actual asciende a 15 millones. Aparte tiene una Sicav, Orto Inversiones, que destina el 71% de los 10,3 millones de su patrimonio a la renta variable. La sociedad, gestionada por el BBVA, utiliza distintos fondos de inversión de la propia entidad para comprar acciones de empresas españolas y utiliza fondos de grandes gestoras internacionales como Fidelity, Fleming y Franklin Templeton para la renta variable internacional.
González, gran conocedor de los mercados de capitales durante su etapa al frente de la sociedad FG Valores, fue aumentando, al igual que las grandes fortunas, el peso de la parte exterior de su cartera a lo largo de 2004.
Pero no todos los altos ejecutivos tienen un perfil tan agresivo como Alierta y González. Un ejemplo es José María Castellano. El vicepresidente de Inditex tiene una participación directa del 0,225% de la compañía textil, paquete cuya cotización en el mercado es de 32,4 millones. Otra parte de su dinero la distribuye Castellano a través de su Sicav, Dorneda de Inversiones, cuyo patrimonio es de 8,05 millones. Gestionada por Banif, es una sociedad de corte conservador. El 69% del dinero está invertido en renta fija, principalmente en emisiones en el extranjero.
En la cartera de renta variable española las apuestas estrella de Castellano son Santander y Telefónica, con el 3,8 y el 2,9% respectivamente. En general, el vicepresidente de Inditex apuesta por compañías sólidas, con ingresos recurrentes y alta rentabilidad por dividendo como Abertis, Popular, Endesa, Gas Natural, Aguas de Barcelona e Iberdrola.
También es conservadora la Sicav de Helena I. Revoredo, presidenta de Prosegur. Con un patrimonio de 7,9 millones, Romer Capital, gestionada por Gesconsult, invierte el 71,47% de su cartera en renta fija. Llama la atención en este caso que la mayor parte de las emisiones son bonos corporativos de compañías extranjeras.
El más conservador de todos es José María Fernández Sousa, presidente y máximo accionista de Zeltia. Su Sicav, Spilbo, está gestionada por Gesbankinter y tiene un patrimonio de 4,8 millones, el 95% del cual está invertido en renta fija internacional.