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Incendio en el edificio Windsor

La demolición del Windsor durará entre 8 y 10 meses

Los trabajos de demolición del Windsor, que comenzaron el viernes con la instalación de dos grúas de 140 metros de altura, durarán entre 8 y 10 meses. En ese tiempo, los operarios de la constructora Ortiz y los técnicos del ayuntamiento trabajarán en turnos continuos.

Aunque el riesgo de derrumbe completo del edificio Windsor está descartado por los bomberos, es posible que haya colapsos parciales al iniciar la demolición. Por eso, en la laboriosa tarea de desmontar la torre, junto a los expertos de la constructora Ortiz y los técnicos del Ayuntamiento trabajarán robots que se alzarán a las plantas más altas para desmontar el edificio.

La demolición del Windsor durará entre 8 y 10 meses, según aseguró ayer el jefe del Departamento de Edificación del consistorio madrileño, Emilio García de Burgos, que está coordinando toda la operación. 'No vamos a determinar plazos hasta que no sepamos el ritmo de los trabajos', aseguró.

Sin embargo, y dada la complejidad de la tarea, los expertos trabajarán en turnos continuos para tener en todo momento controlado el edificio.

Las dos grúas que se instalaron ayer miden 140 metros de altura y 70 metros en horizontal. La carga que pueden soportar depende de la distancia desde donde trabajen, pero según los técnicos del Ayuntamiento, estas grúas pueden recoger elementos de seis e incluso hasta de 40 toneladas.

Tampoco se descarta instalar más grúas, pero según García de Burgos, 'primero hay que determinar las medidas que hay que adoptar en sótanos y galerías, en función de las cargas de las grúas'.

Lo primero que desmontarán las nuevas grúas será la grúa que está anclada encima del edificio y que soportó las llamas.

Esta primera actuación se engloba dentro del plan que está preparando el Ayuntamiento y que estará listo esta semana. Por ahora sólo se ha especificado que el desmontaje del Windsor se hará desde arriba y desde el exterior.

En cuanto a las técnicas que se emplearán para cortar las placas de hormigón del edificio, los técnicos estudian varios sistemas, como el empleo de sopletes, lanzas térmicas, sistemas de agua a presión y láser. Además, se colocarán pantallas de neopreno en las zonas donde haya más riesgo de caídas de escombros.

En las horas nocturnas, los operarios retirarán los escombros para entorpecer lo menos posible la circulación.

¿Había alguien en la planta 16?

 

 

Una gran incógnita rodea desde el jueves el siniestro. Una cinta de vídeo grabada por una pareja desde un edificio cercano al Windsor muestra aparentemente las siluetas de al menos dos personas en la torre 16. Lo extraño es la hora de la grabación: de las 3 a las 5 de la madrugada, dos horas después de que los bomberos abandonaran el interior de la torre debido a que las llamas impedían cualquier acción. El Ayuntamiento de Madrid, que 'no duda de la veracidad de la grabación', asegura que no se trata de bomberos. Los videoaficionados llamaron al servicio de urgencias para alertar de la presencia de personas, pero allí les dijeron que se trataba de bomberos. La planta 16 la ocupaba Deloitte y estaba dedicada a labores de auditoría. Un portavoz de la compañía aseguró que ninguno de sus trabajadores se encontraba en el edificio la noche del siniestro.

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