Las expectativas tecnológicas
La revolución de las comunicaciones aportada por las nuevas tecnologías ha cambiado notablemente las formas de vida en la sociedad moderna, pero, en opinión del autor, su expansión a todo el mundo requiere un coste de implantación menor y precios más bajos de los servicios
Las comunicaciones se han convertido en una parte integral de todos los cambios que está experimentando nuestra forma de vivir y de entender la convivencia. Las nuevas tecnologías han revolucionando multitud de aspectos en nuestras vidas -la forma en la que trabajamos, aprendemos, recibimos atención médica, viajamos o simplemente, nos entretenemos-.
Para que la comunicación global sea una realidad es necesario afrontar diversos retos. El Banco Mundial estima que la mitad de la población mundial sobrevive con menos de dos dólares al día, y el servicio telefónico es todavía un lujo en muchas regiones. La mitad de la población de África, unos 800 millones de personas, y el 75% de los habitantes de China (unos 1.300 millones de personas) nunca han hecho una llamada telefónica. Además, existe una gran desigualdad en el acceso a determinados servicios entre la población urbana y la población rural muy común en los mercados emergentes.
Las ventajas de las comunicaciones globales son un hecho, pero para un acceso global es preciso disminuir los costes de implantación y el precio de los servicios ofertados. Las redes nuevas convergentes, al disponer de una infraestructura unificada para voz y datos, reducen significativamente los costes operativos. Con una red única es más sencillo y rentable ofrecer accesos de banda ancha de alta velocidad fiables y seguros para voz, datos, multimedia o vídeo, individual o conjuntamente, utilizando diversos dispositivos, como teléfonos, ordenadores, o PDA. El núcleo de estas redes convergentes son las tecnologías de paquetes como internet protocol (IP), y voz sobre IP (VoIP), que convierten cualquier tipo de información en paquetes diminutos que se envían de la misma forma que un e-mail o la información de una determinada web.
Las pymes pueden disponer hoy de una amplia gama de servicios que, hasta ahora, sólo podían permitirse las grandes compañías
Con esta tecnología de redes convergentes las fronteras entre países desaparecen, facilitando su acceso a otros usuarios. Por ejemplo, las pequeñas empresas pueden disponer de una amplia gama de servicios que, hasta ahora, sólo podían permitirse las grandes compañías. Ahora, con una pequeña cuota mensual, tienen acceso a un servicio telefónico con llamadas de larga distancia baratas, fax, correo electrónico y otros servicios multimedia unificados en un mismo proveedor de servicios.
El desarrollo de servicios a través de redes paquetizadas también tiene grandes implicaciones en otros ámbitos como la sanidad y la educación. Cualquier persona con un ordenador y una conexión a internet, incluso en las regiones más remotas, puede convertirse en un estudiante virtual de una de las mejores instituciones del mundo y colaborar en tiempo real con otros estudiantes o profesores gracias a la mensajería instantánea.
La atención sanitaria ha experimentado importantes mejoras, no sólo en la forma en la que se ofrece, sino en cómo y cuándo se recibe. Por ejemplo, los registros digitalizados de pacientes pueden ser compartidos y accesibles en tiempo real, permitiendo al médico de una pequeña población interactuar con especialistas que están a cientos de kilómetros. La atención sanitaria no está, por tanto, restringida sólo a las grandes ciudades.
Por otro lado, estas nuevas aplicaciones ya no son exclusivas de la comunicación por cable, sino que son accesibles a través de tecnologías inalámbricas 3G que ofrecen auténtica movilidad, en cualquier lugar y en cualquier momento.
Puede parecer que estos servicios están fuera del alcance de algunos mercados en los que los servicios telefónicos básicos no están aún disponibles para toda la población. Sin embargo, con el desarrollo de una nueva tecnología inalámbrica 3G llamada CDMA 450 es posible dar servicio a todo el mundo. El espectro 450 Mhz es un espectro de radio de baja frecuencia que permite una cobertura rentable en un área extensa, por lo que el servicio a áreas remotas o rurales es posible con muy pocas estaciones base. CDMA 450 puede ofrecer servicios comunicativos básicos en aquellas regiones en las que una población dispersa no se puede permitir el alto coste del cable.
Para servicios inalámbricos fijos, esta nueva tecnología sólo requiere una pequeña antena en el tejado que conecta al usuario con la estación base de área local. Esto supone un ahorro sustancial en capital y coste operacional que, a su vez, conlleva una disminución de las tarifas. También ofrece servicios de datos de banda ancha, como acceso de alta velocidad y capacidades multimedia.
En definitiva, es claro que las comunicaciones no pueden solucionar la pobreza en el mundo, curar enfermedades o proteger el entorno, pero pueden jugar un importante papel catalizador. æpermil;sta no es una visión altiva o altruista. Las tecnologías de la información son parte integral del progreso en esas y otras tantas problemáticas globales de la condición humana.