Santander da pie a la mayor subida desde noviembre, un 1,45%
La Bolsa siempre tiene un argumento, cuando no es uno es otro. Como muestra, la sesión del viernes, que empezó sin pena ni gloria, condicionada por los malos resultados de Dell y lo que prometía ser una apertura bajista en Nueva York.
La Bolsa siempre tiene un argumento, cuando no es uno es otro. Como muestra, la sesión del viernes, que empezó sin pena ni gloria, condicionada por los malos resultados de Dell y lo que prometía ser una apertura bajista en Nueva York. El Ibex, tras pasar la sesión con leves avances, aceleró en el último tramo de negociación de la mano del Dow -que se disparó por rumores sobre movimientos políticos en Corea del Norte- y marcó la mayor subida desde mediados de noviembre, un 1,45%. Con un ánimo comprador a prueba de sustos, la Bolsa se acerca a los 9.600 puntos (cerró en 9,588) y acumula una subida del 6,6% en las seis semanas del año.
En la semana, el alza del Ibex fue del 1,76%. Y el artífice de este comportamiento fue, en buena medida, Santander. Ha avanzado en cinco sesiones un 4,4%, generando por sí solo dos tercios (67 puntos de 166) de la subida del Ibex 35 en el periodo. El viernes subió un 2,75% y se acercó a los 10 euros.
Además, por una vez el inversor se fija más en los resultados propios que en los de Estados Unidos, una carta que esta semana aprovecharon varias compañías, como Iberdrola. La eléctrica registró una subida del 2,42%, después de comunicar el jueves las cuentas del año pasado. Ha recibido un buen número de recomendaciones positivas y reforzado los máximos históricos en los que cotiza desde hace semanas. El mejor valor del Ibex en la semana ha sido otro que ha rendido cuentas, Mapfre, con un avance en cinco sesiones del 5,16%. Y fuera del Ibex la disposición del inversor a asumir riesgo ha permitido subidas en Campofrío Zeltia, Urbas o Jazztel.
Los analistas siguen avisando de las posibilidades de una corrección. Teóricamente éstas son más altas a medida que el mercado avanza y apenas se toma un par de días de descanso -en este caso, miércoles y jueves- entre máximo y máximo. Pero el inversor que se juega el dinero ve la partida desde otro primas y, mientras dure la racha alcista, prefiere exprimirla al máximo.
La especulación al poder
Es una de las reglas no escritas de la Bolsa. El número de rumores presentes en el mercado es directamente proporcional al volumen de las subidas de la Bolsa. Y cuando el mercado acumula una buena racha empiezan a resonar los tambores. Pueden ser fusiones, compras o segregaciones de empresas, pero también noticias más heterodoxas. El viernes algunos medios de comunicación de Estados Unidos aludían a rumores sobre un golpe de Estado en Corea del Norte como explicación de la subida del Dow. Una noticia que recordaba a las que llegaban en 2003, cuando con periodicidad mensual Bin Laden era atrapado y la Bolsa de disparaba. Pero lo que de verdad mueve dinero son los rumores en torno a valores de perfil más especulativo, algunos de los cuales están reviviendo, a pequeña escala, años mejores. Ejemplos no faltan, hasta el punto de que son decenas las compañías que ganan más del 20% en el año.