Las familias vuelven a confiar sus ahorros a los fondos de inversión

Las familias españolas se han vuelto a sentir atraídas por los fondos de inversión, donde ya acumulan una inversión de 168.400 millones de euros, un nivel que no alcanzaban

desde comienzos del año 2000 y que está muy próximo al máximo histórico logrado en 1999.

Según los últimos datos del Banco de España, correspondientes a noviembre del año pasado, el dinero que destinan los españoles a estos productos de ahorro no ha cesado de crecer en los dos últimos años, lo que pone fin al período de ajuste vivido entre 1999 y el año 2002.

En esa época, las retiradas de dinero de los fondos de inversión fueron masivas, debido a las fuertes caídas que sufrieron los mercados bursátiles mundiales tras los excesos de la burbuja tecnológica.

Así, de los casi 181.000 millones de euros que tenían invertidos las familias españolas en fondos a finales de 1999, se pasó a apenas 130.000 millones a mediados de 2002.

Cambio de tendencia

La tendencia parece haberse invertido al calor de las nuevas subidas de la renta variable y, de hecho, el ahorro destinado a fondos de inversión creció entre noviembre de 2003 y noviembre de 2004 el 10,57 por ciento, algo más de 16.100 millones de euros.

El avance de los últimos meses ha propiciado que el peso de los fondos de inversión respecto al total de activos financieros de las familias (efectivo, depósitos, acciones y valores y derivados) haya aumentado, según datos de septiembre de 2004, hasta el 12,8% la cifra más alta en tres años.

No obstante, a los fondos les queda un gran terreno que recuperar, dado que en septiembre de 1998 llegaron a suponer casi el 20% de los activos de las familias españolas. Este tipo de productos financieros también ha cedido posiciones respecto a la inversión directa en acciones, que actualmente representa el segundo instrumento de ahorro para los españoles, por detrás de los depósitos.

A finales del tercer trimestre de 2004, las familias tenían destinado a acciones 269.116 millones de euros, 100.000 millones más que a fondos de inversión.

Pese a estas desventajas, las gestoras coinciden en que la industria vive un buen momento, con máximos históricos en el patrimonio gestionado y en el número de productos comercializados por entidades financieras y otro tipo de sociedades.