Hacia una cocina sin barreras
Los adelantos tecnológicos aplicados a los electrodomésticos de línea blanca pueden ayudar a hacer la vida más fácil al colectivo de invidentes. La Once, a través de su Centro de Investigación, Desarrollo y Aplicaciones Tiflotécnicas (Cidat), lleva cuatro años colaborando con los fabricantes para intentar solventar desde la cadena de producción las barreras que ofrecen estos productos a los invidentes. Las actuaciones van encaminadas a dotar a los electrodomésticos de indicaciones en Braille, de sonido o de ambos elementos a la vez.
New Pol, Iberinox, Fagor o BSH son algunos de los fabricantes que se han puesto manos a la obra para sacar al mercado productos adaptados para discapacitados. El resultado varía desde frontales de lavadoras con indicaciones en Braille hasta hornos de cocina o calderas con tecnología Bluetooth para facilitar la programación.
Pero aún queda mucho camino por recorrer, según reconoce José Luis Fernández, director del Cidat. 'Todavía no hay mucha oferta en el mercado, por lo que son los propios invidentes quienes tienen que adaptar su propio electrodoméstico', resalta.
Según un estudio realizado por Expert y la Once, los invidentes consideran que la televisión, el microondas y la lavadora son los aparatos con mayor necesidad de adaptación. 'Hace diez años los electrodomésticos eran accesibles por su carácter analógico, pero ahora con las técnicas digitales se ha complicado todo', indica Fernández.
En este campo de las adaptaciones, España es un país puntero. 'En Europa se hace de una manera más aislada y no se ha trabajado con tantas empresas como aquí. A pesar de ello, lo que hemos conseguido sólo son grandes acciones aisladas. Hay que conseguir que todos los fabricantes desarrollen y diseñen sobre esta cuestión', concluye.