Martínez Pardo, hombre clave en el 'caso FG Valores'
La CNMV lo dejó claro desde el primer día. Las irregularidades contables que detectó Merrill Lynch en FG Valores cuando cerraba la compra de la sociedad de Bolsa han prescrito como falta administrativa y, pese a sumar un monto de 800 millones de pesetas, difícilmente pueden ser delito penal al no haber terceros perjudicados. Lo que investiga el regulador es por qué razón la CNMV no investigó en profundidad dichas irregularidades contables y por qué, según las primeras informaciones difundidas por el regulador, no encuentra las cartas en las que Merrill denunciaba el caso.
En este sentido, la pieza fundamental es el destinatario de las cartas en las que Merrill Lynch, tras haber sido advertido por un empleado de FG Valores, informa de las 'irregularidades contables' que han conducido a 'modificar el esquema contractual convenido en su día', según una carta de Merrill a Martínez Pardo fechada el 25 de julio de 1996.
Martínez Pardo fue, de hecho, la primera persona en ser llamada a declarar por el presidente de la CNMV, Manuel Conthe, sobre este caso y. según la cadena SER, el viernes volvió a declarar. En su comparecencia afirmó, según algunas fuentes, que informó a sus superiores. Pero otras señalan que declaró no acordarse de nada. Martínez Pardo no ha contestado a las llamadas realizadas por este periódico.
En todo caso, no existe constancia alguna de la reacción del regulador ante esta información. La autorización de la operación llega el 9 de julio, antes de que Merrill fuese consciente de las deficiencias y de que se reestructurase la compra. Francisco González, que difundió el jueves un dossier con documentos sobre la operación, en ningún momento alude a la respuesta de la CNMV después de que fuese informada de la situación.
El procedimiento en estos casos establece que cuando se recibe una información de este tipo, el jefe de entidades (en este caso, Martínez Pardo) envíe en dos o tres días un equipo de inspectores a la sociedad, que consulte con el auditor y remita al comité de dirección un informe para que éste decida sobre los siguientes pasos a tomar.
Pero fuentes cercanas al equipo de Luis Carlos Croissier (presidente de la CNMV hasta principios de octubre) señalan que no tienen ninguna constancia de que se tomasen esos pasos, ni entre los niveles superiores (consejo y presidencia de la CNMV) ni inferiores (subordinados de Martínez Pardo). Fuentes cercanas al equipo de Juan Fernández-Armesto, que sustituyó a Croissier, también niegan haber tenido conocimiento del caso. Añaden que 'ningún inversor salió perjudicado y la solvencia del sistema se reforzó'.
Pero, ¿en qué consistieron las deficiencias contables? Después de sufrir quebrantos por 800 millones en el mercado de bonos en 1994, se orquestó una operación que transfirió el desfase patrimonial a FG Servicios. En un informe sobre el caso, Merrill Lynch lo describe como una 'una deficiencia que se transfirió a FG Servicios, una filial sin auditar y no regulada' y que 'se camufló como una venta de bonos'.
Caída del 6%
Desde que apareciesen las primeras informaciones sobre las irregularidades contables en FG Valores, la acción de BBVA ha caído el 1,6%, menos que Santander en el periodo (un 1,8%) pero más que el Ibex 35(-1,1%) y el Euro Stoxx de banca (-0,3%).
Apoyo sindical a González ante la entrada de Sacyr
CC OO, UGT, CGT y la Confederación de Cuadros, sindicatos representados en la plantilla de BBVA, pedirán a los trabajadores que sean accionistas del banco la delegación de voto para rechazar la 'operación hostil' de Sacyr en la junta general que celebrará la entidad el 26 de febrero. Según los datos públicos del BBVA controlaría más del 2% del capital. Los sindicatos quieren plantar cara a un proyecto que 'desestabilizaría a la entidad y constituye un riesgo para los trabajadores', dijo a Europa Press el secretario de Formación y Comunicación de Comfía-CC OO, Paco Baquero.Mientras, la investigación de posibles irregularidades en la venta de FG Valores sigue provocando reacciones políticas. El presidente del PP, Mariano Rajoy, criticó la 'intervención' del Gobierno 'en empresas privadas' como el BBVA y dijo que 'retrotrae al pasado'. Añadió que provoca que 'la credibilidad y la confianza' de los agentes económicos en España sea 'cada vez menor'. Relacionaba así la investigación con un intento del Gobierno por facilitar la entrada de Sacyr en el banco. El portavoz adjunto del PP en el Congreso, Vicente Martínez Pujalte, por su parte, señaló que el presidente de la CNMV se está 'prestando' a la 'operación orquestada' por el Gobierno. Según Pujalte, éste se quiere 'apropiar' de empresas privadas 'sin pagar ni un duro, para dárselas a los amigos'.Mientras, el comisario europeo de Economía, Joaquín Almunia, respaldó las declaraciones del vicepresidente económico, Pedro Solbes, sobre la importancia de mantener 'la españolidad' del BBVA.