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Construcción de aeronaves

El superavión europeo echa a volar

El mayor avión de la historia de la aviación de pasajeros, el Airbus 380, con capacidad para transportar a 800 personas a 15.000 kilómetros de distancia sin escalas, fue presentado ayer en la localidad francesa de Toulouse y se encuentra listo para el despegue.

La ceremonia de puesta de largo de la superaeronave se convirtió en una asamblea multitudinaria de afirmación de los valores europeos y en el mejor acto de propaganda para pedir el voto positivo en el inminente referéndum para ratificar la nueva constitución de la Unión Europea.

Desde el punto de vista industrial, el evento pretendió escenificar la consolidación de la supremacía del Viejo Continente frente a su eterno competidor, Estados Unidos, en el sector emblemático de la construcción de aeronaves de pasajeros.

En la localidad francesa se dieron cita unas 5.000 personas, entre ellas mil periodistas de todo el mundo. Junto a los jefes de Estado o presidentes de Gobierno de los cuatro países que participan en la coordinación de la construcción del aparato, España, Francia, Alemania y Reino Unido, estuvieron presentes los altos directivos de Airbus y los presidentes de las 14 compañías aéreas que ya han adquirido compromisos de compra en firme sobre un total de 149 aparatos A380. La industria aeronáutica europea también estuvo nutridamente representada.

Por parte española asistieron altos ejecutivos de las diez empresas que actúan como subcontratistas a riesgo de Airbus España; el presidente de Spanair, Gonzalo Pascual, así como diversos presidentes de comunidades autónomas en las que se fabrica alguna pieza del aparato.

En su intervención, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aprovechó para reclamar una mayor participación en los futuros proyectos de Airbus. Sin citarlo, Zapatero hacía referencia al nuevo modelo A350, cuya fase de desarrollo ha sido puesta en marcha en diciembre. En los próximos meses debe decidir cuál es el protagonismo industrial de cada uno de sus miembros en este futuro avión de 350 pasajeros.

España, a través de la SEPI, cuenta con una participación accionarial en EADS (el propietario de Airbus) del 5,5%, mientras que en el superavión bautizado ayer sus aportaciones industriales se acercan al 10%. La petición de Zapatero ayer a favor de una mayor participación en los futuros proyectos del constructor europeo refuerza una vieja reivindicación de la SEPI y del Ministerio de Industria, que consideran que la capacidad en los órganos de decisión españoles dentro de Airbus no se corresponde con su aportación real.

Zapatero remarcó el carácter emblemático del nuevo superavión, del que aseguró que era 'fruto del sueño europeo' y 'un monumento a la inteligencia'. Afirmó que sin la colaboración de los cuatro países de la UE que participan en el accionariado de EADS, 'el proyecto habría resultado inviable'.

El presidente francés, Jaques Chirac, aseguró que el superavión de Airbus es una muestra más de que el Viejo Continente ha logrado arrebatar el liderazgo en la construcción de aviones civiles a su eterno competidor, Estados Unidos. Chirac pidió que esta experiencia de cooperación comunitaria se aplicara también en los sectores de la energía, los transportes y los medicamentos.

Fuentes de Airbus explicaron que el consorcio tiene a punto dos posibles contratos de suministro para diez unidades del superavión presentado ayer con dos compañías asiáticas. Se especuló con la posibilidad de que estos nuevos pedidos fueran anunciados durante el acto de ayer, pero finalmente no se produjo la comunicación. En caso de confirmarse el número de contratos en firme se situaría en 159. El constructor europeo ha situado en 250 las unidades necesarias para conseguir el equilibrio económico del proyecto del Airbus 380. No obstante, hace cinco semanas Airbus reconoció que el presupuesto inicial se había incrementado en 1.500 millones de euros, con lo que el coste real del desarrollo del superavión supera los 11.000 millones de euros.

Poco margen en el mercado español

Rafael Alonso, vicepresidente de Airbus para el mercado de España, Latinoamérica y el Caribe, aseguró ayer en Toulouse que aunque Iberia aún no ha adquirido ninguna unidad del nuevo superavión, existen dos rutas entre las que explota la compañía aérea española que se adecúan perfectamente a sus características. Se trata de las líneas que unen Madrid con Buenos Aires y con Ciudad de México.

Alonso Explicó que, en ambos casos, se cumple el requisito que hace rentable la operación de este avión, ya que entre estas capitales existe hoy un tráfico que hace necesario el vuelo diario de dos grandes aviones Boeing 747, Jumbo, o de dos grandes aviones Airbus 340.

Alonso reconoció que las únicas negociaciones que mantiene Airbus con Iberia ahora están encaminadas a lograr un posible acuerdo para renovar 76 aviones de la flota de medio y corto radio de la compañía española. Iberia tiene previsto anunciar en el plazo de dos meses cuál de los dos gigantes de la construcción aeronáutica civil mundial, Airbus o Boeing, será el adjudicatario de este nuevo contrato. Los aviones que el constructor europeo ofrece a Iberia son los de la familia del Airbus 320, cuya gama tiene aparatos con un número de asientos que oscila entre 100 y 280.

De hecho, el presidente de Iberia, Fernando Conte, dijo ayer en Madrid, en el marco de la presentación de la feria de turismo Fitur, que la compañía no tiene pensado adquirir el A380, ya que se trata de un avión 'que sólo se puede utilizar en rutas de largo recorrido y con altas densidades'.

Conte explicó a la prensa que 'es preciso tener en cuenta que de ese avión no se puede comprar sólo una unidad, hay que tener flotas con varias unidades, y nosotros no tenemos, de momento, mercados que demanden ese tipo de aviones'. Conte aseguró que si Iberia pusiera este avión en sus mercados y quisiera mantener el número de frecuencias que tiene ahora, 'simplemente no lo podríamos llenar', y reducir frecuencias 'no es un buen servicio para los clientes'. El vicepresidente de Airbus para España afirmó que se han hecho presentaciones del avión a algunas compañías chárter españolas, pero que no existen negociaciones en firme con ninguna de ellas. En Latinoamérica el constructor europeo mantiene contactos con varias empresas.

El directivo de Airbus aseguró que las reformas de Madrid-Barajas y Barcelona-El Prat, han tenido en cuenta las necesidades de operación del Airbus 380. También desveló que el superavión podría participar en la inauguración de las dos nuevas terminales de Barajas.

Una fuente de creación de empleo

La fabricación del nuevo avión A380 creará unos 4.000 empleos en España en los próximos tres años, según el presidente de Airbus-España, Manuel Hita, quien señaló que en 2007 las plantas de la factoría en Puerto Real, Getafe e Illescas emplearán a unas 6.000 personas, directa e indirectamente.Hita manifestó que 'en estos momentos estamos a la mitad de la creación de empleo y, a final de año, estaremos ya a velocidad de crucero'.

Un gigante de 280 millones de dólares

En el plazo de pocas semanas, antes de abril, el superavión de Airbus realizará su primer vuelo de pruebas. Durante casi un año, tras este primer despegue, los cuatro modelos construidos realizarán un verdadero maratón de ensayos para culminar las 2.000 horas de vuelo exigidas para la certificación. El objetivo es que la aerolínea asiática Singapore Airlines pueda realizar el primer vuelo comercial en marzo de 2006.El precio de catálogo del nuevo aparato asciende a 280 millones de dólares. Tras esta cantidad se esconde una significativa serie de innovaciones tecnológicas que convierten al A380, no sólo en el aparato para vuelos civiles de pasajeros más grande construido hasta la fecha, sino también en el más sofisticado.En la cabina de mando se lleva hasta sus últimas consecuencias la informatización de las tareas que hasta hace un par de décadas eran responsabilidad manual de los pilotos.Por primera vez los sistemas de mando están integrados en un solo ordenador que cuenta con conexiones vía satélite permanentes con las redes terrenas. Ello les permite recibir actualizaciones de todo tipo de informaciones en pleno vuelo. Cualquier contingencia, sea por razones de prevención, alarma o simplemente por motivos operativos es advertida a tierra vía transmisión de datos y en tiempo real.Las novedades técnicas del súper Airbus invaden también la cabina de pasajeros. Incluso la luz simula el paso del día a la noche para disminuir el impacto del jet-lag en los usuarios.

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