El mercado del arte teme una próxima burbuja en los precios
Los coleccionistas comprarán y venderán arte por 20.000 millones de dólares este año, según la empresa alemana Artnet, y muchos intentan decidir si están adquiriendo sus cattelanes y picassos cuando los precios se encuentran en su máximo nivel. 'Este mercado me recuerda la locura del auge del Nasdaq antes de que concluyera en 2000', dice Robert Harshorn Shimshak, radiólogo de California que colecciona arte contemporáneo. 'Sabré que es tiempo de vender si empiezo a escuchar recomendaciones de arte en mi cafetería habitual'.
Los precios del arte están siendo impulsados al alza por coleccionistas que van desde Broad Art Foundation, de Eli Broad, y Charles Saatchi, de la Galería Saatchi de Londres, hasta especuladores que buscan alternativas a la renta variable. Los precios del 25% de los cuadros de arte contemporáneo más caros vendidos en subastas subieron a más del triple desde 1996, según la empresa londinense Art Market Research.
Algunos coleccionistas aseguran que los compradores podrían sufrir pérdidas si intentan vender pinturas compradas recientemente, como los inversores que compraron acciones de empresas puntocom cuando el auge estaba casi en su clímax. Los valores no seguirán subiendo para siempre sólo porque los ricos están formando sus colecciones, afirma Marvin Ross Friedman, agente de Miami y coleccionista de obras de artistas como Andy Warhol y Roy Lichtenstein. 'Estas compras sugieren un tipo de instinto de rebaño y el mercado podría ir rumbo a una seria corrección', dice Friedman. 'Muchos de los nuevos coleccionistas no saben gran cosa de historia del arte ni tienen conocimientos fundamentales de lo que están comprando'.
Creaciones de artistas vivos, desde Maurizio Cattelan hasta Marlene Dumas, se venden ahora en subastas por un millón de dólares o más
Las obras de artistas vivos, desde Maurizio Cattelan hasta Marlene Dumas, se venden ahora en subastas por un millón de dólares o más, e incluso las obras de artistas relativamente desconocidos se venden como pan caliente en las ferias de arte. Shimshak asegura que intentó comprar una obra de la artista africana de moda Wangechi Mutu en la feria Art Basel Miami Beach en diciembre, pero que se vendió tan pronto como la muestra fue inaugurada.
El momento lo es todo para los compradores de arte, así como para los inversores. Shimshak dice que sus mejores compras han sido artistas como Edward Ruscha antes de que fueran famosos.
Antes de que los precios del arte se desplomaran de 1990 a 1991 también hubo un alza en las compras especulativas de obras contemporáneas, con subidas repentinas en los precios, según True Colors: The Real Life of the Art World, un libro de 1996 de Anthony Haden-Guest.
Ninth Hour, de Cattelan, que muestra al papa Juan Pablo II siendo derribado por un meteorito, se vendió en una subasta en Phillips de Pury en Nueva York por 2,7 millones de dólares en noviembre. La escultura, una de dos copias hecha de cera, tela, resina y polvo de roca, se vendió en 800.000 dólares en una subasta en Christie's en 2001, según Art Sales Index.
Las ofertas por el arte subieron en los ochenta debido a los nuevos coleccionistas europeos y japoneses, y luego cayeron cuando los efectos del colapso de la Bolsa se expandieron.