Telefónica pide al Gobierno un plan de choque en banda ancha
César Alierta anunció ayer ante el ministro de Industria inversiones de 9.000 millones en banda ancha hasta 2008, pero a cambio pidió al Gobierno un compromiso en firme, con un 'macroproyecto' de dimensión global y un apagón analógico en telecos para la administración.
El presidente de Telefónica, César Alierta y el ministro de Industria, José Montilla, se encontraron ayer frente a frente en la sede de Telefónica, durante la presentación del informe que hace cada año la operadora sobre la sociedad de la información en España.
Los datos del estudio fueron tan desalentadores como es acostumbrado en este tipo de comparaciones europeas. España está a la cola en uso de tecnologías dentro del grupo de la Europa de los quince y sólo mejora un poco en la clasificación cuando se amplía la muestra a los 25 miembros actuales.
La penetración del ordenador en los hogares, los usuarios que compran por Internet y las empresas con acceso a la Red son, por ejemplo, tres aspectos en los que España está por debajo de la media tanto europea como de los países más desarrollados.
Sin embargo, hay algunos datos que invitan al optimismo. Uno de ellos es la penetración de la banda ancha en los hogares que ya tienen Internet, que alcanza el 43% y supera la media comunitaria. Otro dato para la esperanza es que en 2004, por primera vez, el número de personas que usaron la banda ancha para conectares a Internet superó a las que lo hicieron con una conexión tradicional.
Y estos fueron los datos que manejó Alierta para demostrar que, con un poco de ayuda, la banda ancha y el uso de las tecnologías pueden explotar en España.
Telefónica tiene claro que el futuro de su negocio y sus resultados pasan por ahí, así que ha revisado sus cifras de inversiones en España y ha prometido 9.000 millones entre 2005 y 2008, según anunció ayer Alierta.
Estos desembolsos se dedicarán a la banda ancha tanto desde dispositivos fijos como móviles, a la que se destinarán 4.500 millones. El resto, vendrá de inversiones complementarias en infraestructuras, subvenciones de terminales de la clase que sean y comercialización, entre otros.
Con estas inversiones, la operadora confía en llegar a 2008 con 10 millones de accesos ADSL en el mundo, de los que 6,5 millones estarán en España.
Pero a cambio de este esfuerzo, Alierta pidió ayer un poco de ayuda al Gobierno. Por ejemplo, la administración tiene en sus manos la posibilidad de concienciar a los ciudadanos de la necesidad de engancharse a la tecnología si fomentara el uso de la sociedad de la información en los contactos mutuos. El paso más definitivo y clave en este sentido sería un apagón analógico en telecomunicaciones. Es decir, que la administración pusiera fecha al momento en que será imposible comunicarse o recibir de ella un papel en todos los contactos, lo que hará imprescindible la comunicación electrónica.
Alierta también pidió al Gobierno 'macroproyectos' en el campo de la tecnología, similares a 'otros grandes programas del sector industrial o de infraestructuras'. Como ejemplo de aspectos a impulsar, habló del DNI o la receta electrónicos o la enseñanza reglada online.
Montilla ofrece todo el apoyo del Ejecutivo
Lejos de negar la brecha digital o la distancia de España con respecto a los países de Europa en materia de desarrollo tecnológico, el ministro de Industria lo reconoció. 'El Gobierno está decidido a cambiar las cosas y estamos haciendo cosas para cambiar', aseguró Montilla.Las iniciativa más contundente que destacó en este sentido fue el Plan de Convergencia con Europa, que el Gobierno lleva un tiempo elaborando. De forma más concreta y en respuesta a la petición de apagón analógico, citó la decisión del Ministerio de Economía de forzar a las medianas y grandes empresas a mandar de forma electrónica los datos de retenciones de sus empleados. También aludió a los registros telemáticos del Ministerio de Industria o a las campañas de información en 499 municipios a través de la campaña Todos.es.