Rajoy excusa el silencio de los empresarios ante el 'plan Ibarretxe'
El líder del PP, Mariano Rajoy, excusó ayer el silencio que mantienen los empresarios vascos sobre la reciente aprobación del plan Ibarretxe en el Parlamento de Vitoria. La patronal vasca Confebask aun no ha emitido opinión alguna sobre el visto bueno recibido por el plan en el Parlamento autónomo y tampoco se ha escuchado hasta ahora la opinión de ninguna de las tres patronales provinciales al respecto.
Preguntado por este silencio, Rajoy respondió que si el presidente del Gobierno 'lo asume el plan como lo está asumiendo', quizás sea 'mucho pedir a otros que se pronuncien y den la cara'. No obstante, advirtió a los empresarios de que 'un escenario como el que se ha abierto no puede generar más que incertidumbre y desconfianza, no viene nada bien a la economía vasca ni tampoco a los agentes económicos y sociales. Este no es sólo un asunto político', agregó, 'porque afecta a todos'.
El PP se ha propuesto marcar distancias con el Gobierno, al que acusa de 'inacción' y de 'falta de liderazgo' para afrontar este desafío. Por ello Rajoy ha pedido a José Luis Rodríguez Zapatero que se oponga a la tramitación del plan Ibarretxe en el Congreso y que lo recurra al Tribunal Constitucional.
Sin embargo, Zapatero ha optado por combatir este plan intentando debilitar al PNV en las urnas. El presidente considera que un frente común entre el PSOE y el PP sólo contribuiría a fortalecer a los nacionalistas vascos en las elecciones de mayo. Su cálculo se basa en la experiencia cosechada durante la etapa en la que Jaime Mayor Oreja dirigió el PP vasco. Esta es la razón por la que el Gobierno apuesta porque sea en el Congreso donde se frene el plan, dejando el Tribunal Constitucional como último cartucho a emplear en caso de que Ibarretxe salga oxigenado de las elecciones y aumente su desafío.
Firme rechazo del PSOE al proyecto
El PSOE aprobó ayer una resolución de rechazo al plan Ibarretxe por considerar que rompe el actual marco constitucional y estatutario y es 'bendecido' por ETA 'y sus acólitos'.El plan ha merecido el rechazo de amplios sectores sociales, incluida la Conferencia Episcopal, y va a ser recurrido al Constitucional por el Gobierno navarro porque considera que invade competencias de esta comunidad.El presidente del Parlamento vasco, Juan María Atutxa, lo entregará el viernes al Congreso, donde será debatido en pleno a mediados de marzo.